Sam Bankman-Fried, el magnate de las criptomonedas, quien fue condenado por fraude en noviembre, aguarda su sentencia, que podría ser una de las más extensas en la historia de los delitos
financieros en Estados Unidos. El fiscal de Nueva York, Damian Williams, está solicitando entre 40 y 50 años de prisión para él. Bankman-Fried, fundador y presidente de la plataforma de intercambio de criptomonedas FTX, fue declarado culpable por un jurado de Manhattan de 7 cargos, incluyendo fraude, conspiración y lavado de dinero.
Bajo el sobrenombre de "SBF", utilizó los depósitos de los clientes de su plataforma sin su consentimiento para llevar a cabo operaciones de alto riesgo en su fondo de cobertura, Alameda Research. Además, empleó estos fondos para adquirir lujosas propiedades y realizar donaciones políticas.
Bankman-Fried se elevó al estatus de multimillonario antes de cumplir los 30 años, conquistando el mundo de las criptomonedas a una velocidad asombrosa. Transformó FTX, una modesta empresa que cofundó en 2019, en la segunda plataforma de intercambio más grande del mundo.
Sin embargo, en noviembre de 2022, el imperio de FTX colapsó. La empresa no pudo hacer frente a las enormes solicitudes de retiro de fondos por parte de clientes aterrorizados al descubrir que parte de los fondos depositados se habían utilizado en operaciones de alto riesgo. En el momento de la declaración de quiebra, se estimaba que faltaban alrededor de 9.000 millones de dólares.
Los liquidadores del grupo lograron recuperar aproximadamente 6.400 millones de dólares en efectivo y tienen planes de reembolsar por completo a los clientes afectados. Este éxito se debe en parte a la notable apreciación de las criptomonedas, las cuales se recuperaron tras un desastroso 2022 marcados por múltiples quiebras y el escándalo de FTX. Impulsado por la afluencia de inversores y el lanzamiento de nuevos productos de inversión, el bitcóin, líder indiscutible en el mundo de las criptomonedas, alcanzando récords desde marzo.
Sam Bankman-Fried un "estafador" humanitario
En un intento por contrarrestar la posibilidad de una larga condena, los abogados de Sam Bankman-Fried, de 32 años, trató de pintar una imagen más humanizada de "SBF", en lugar de la percepción de manipulador que surgió durante el juicio. "Aquellos que conocen a Sam saben que es desinteresado, altruista", escribieron sus defensores en un documento presentado al juez federal Lewis Kaplan previo a la audiencia, junto con decenas de cartas de apoyo de personas cercanas.
Quienes le conocen "comprenden que su conducta 'nunca ha estado motivada por la codicia o la sed de prestigio'", agregaron sus abogados al citar testimonios para apoyar su petición.
A lo largo del juicio de cinco semanas, sus abogados lo retrataron como un joven empresario abrumado por su carga de trabajo y afectado por los errores de juicio de sus socios y empleados. Para asegurar la clemencia del juez federal, también destacaron que sufre de un trastorno del espectro autista, lo que, según ellos, lo hace "vulnerable entre la población carcelaria". Basándose en estos puntos, la defensa sugiere una sentencia de poco más de cinco a seis años y medio de prisión.
Desde su condena, Sam Bankman-Fried cambió su equipo legal y contrató a Marc Mukasey, quien es mucho más extrovertido y agresivo que Mark Cohen, su defensor anterior de naturaleza más reservada. "En cada aspecto de su actividad y por cada uno de los crímenes cometidos, el acusado ha mostrado una abierta falta de respeto por la ley", insistió el equipo de fiscales de Williams.
En el proceso, la defensa de "SBF" se debilitó ante los testimonios de tres exdirectivos de FTX y de Alameda, entre ellos su exnovia, que aportaron pruebas detalladas del rol principal del acusado en el fraude. "Él comprendía las reglas, pero decidió que no aplicaban para él", insistió la oficina del fiscal en un documento enviado al juez al mencionar una "megalomanía perniciosa" y un "complejo de superioridad".
'Lo siento': Sam Bankman-Fried se disculpa ante el tribunal antes de sentencia
Bankman-Fried dijo ante el tribunal el jueves por la mañana: "Lo siento". Anteriormente, Bankman-Fried había expresado poco arrepentimiento por su papel en lo sucedido en FTX . Sostuvo durante todo el juicio que no había cometido fraude. El jueves, sin embargo, dijo que tomó “una serie de malas decisiones” que “me persiguen todos los días”.
“Mucha gente se siente realmente decepcionada, y se sintieron muy decepcionadas, y lo siento. Lamento lo que pasó en cada etapa”, dijo. “Probablemente mi vida útil haya terminado”.
