El reconocido expiloto de Turismo Carretera (TC) de la marca Chevrolet, Carlos Garrido, fue hallado este martes asesinado a golpes en su casa del paraje La Colmenita, cerca de la ciudad
de Mar del Plata y, aunque aún no está claro el suceso, los investigadores no descartan que se haya tratado de un robo.
Garrido tenía 65 años y fue hallado sin vida en su vivienda, ubicada a la altura del kilómetro 21,5 de la Ruta 88, informaron fuentes policiales y medios locales. El fiscal Alejandro Pelegrinelli, a cargo de la investigación, no descarta ninguna hipótesis y analiza el círculo íntimo de la víctima, que presentaba dos severos traumatismos de cráneo.
Garrido fue hallado este martes asesinado a golpes en su casa del paraje La Colmenita
Además, el cuerpo había sido arrastrado unos 5 metros hasta el lugar donde fue encontrado y su auto, un Citroën C4, apareció incendiado a unos 300 metros de allí. El elemento con el que Garrido fue golpeado no fue identificado todavía, mientras que el cuerpo no presentaba heridas defensivas.
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La policía encontró en la escena del crimen a otro hombre inconsciente que fue trasladado al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), donde permanecía internado con custodia policial, según informó La Capital de Mar del Plata. El sujeto se identificó como el casero de la propiedad y aseguró que había sido atacado por intrusos y que por ello se había desvanecido. Según detalló Clarín, aún no está clara la relación entre ambos y una versión indica que recientemente habrían tenido una fuerte discusión con Garrido.
El auto de la víctima, un Citroën C4, apareció incendiado a unos 300 metros de la casa
Garrido fue un reconocido piloto de TC en las décadas de los 80 y 90. De acuerdo a Noticias Argentinas, en Mar del Plata lo describen como una persona que se brindaba con todos y tenía personalidad pero, a su vez, era reservado en su vida personal y estaba abierto al diálogo constantemente.
Asimismo, su familia fue distribuidora de cerveza Quilmes en la zona del Gaucho y tenía plantaciones de kiwi. Más allá de estos negocios que llevaban adelante, los Garrido eran considerados como "conflictivos" en Mar del Plata y cuentan con el lamentable antecedente del asesinato del custodio de Carlos Alberto Garrido, padre del deportista, en 1998. El policía Ricardo Yori, al tratar de evitar una salidera, recibió un disparo en la cabeza.
Este panorama familiar y los comentarios sobre ellos en la ciudad hicieron que las autoridades marplatenses barajen la hipótesis de que el asesinato de Carlos Garrido podría haberse tratado de algo más que un simple intento de robo.
Garrido, que se inició en los zonales en el circuito El Santo, tuvo una destacada trayectoria en el Turismo Carretera, la categoría más importante del país, y se convirtió en una figura de la marca Chevrolet, escudería de la cual era fanático de chico. En sus inicios, el piloto le compró un TC del Sudeste a Héctor Laurenti, de Coronel Vidal, corrió con motores del ingeniero Jhoseph y posteriormente con los del balcarceño Jorge Reymonte.
Ni bien llegó al Turismo Carretera, Garrido se compró un Chevrolet de calle y se armó en Balcarce. Antes de debutar en el Autódromo de Buenos Aires, lo llevó de acompañarte Roberto Mouras, del cual declaró que "arriba del auto lo hacía todo fácil". El destacado piloto salió tricampeón consecutivo en el TC del Sudeste y en el Turismo Carretera ganó dos carreras.
Últimamente, a Garrido se lo veía más cercano al karting, disciplina en la que su hijo Diego se consagró campeón en 2019 de la categoría Master.
