La estrategia de Biden es distinta a la de su par español. Los demócratas mandaron a Buenos Aires una batería de funcionarios (el Secretario de Estado, Antony Blinken, la del jefe
de la CIA, William Burns, la jefa del Comando Sur, de los Estados Unidos, Laura Richardson), enviaron un guardacostas y un portaaviones y venden aviones y blindados con el fin de garantizarse una alianza mayor con Argentina. Optaron por no hacerse los ofendidos.