Quiero expresar por este medio la solidaridad con el Compañero Sergio Corleta y señora quienes están sufriendo una persecución feroz que ya supera los límites de lo soportable. Su labor periodística propició que sea víctima de amenazas constantes hacia su persona y la de su compañera de trabajo y de la vida, además de padecer el escarnio merced a personajes oscuros que actúan con total impunidad, tiene que soportar la carencia y la necesidad en plena enfermedad, la cual no impide que continúe trabajando con esfuerzo y sin debido apoyo. Hace pocos meses sufrió la amputación de parte de sus extremidades como consecuencia de padecer diabetes, enfermedad que enfrenta desde hace muchos años sin cobertura social y con los recursos acotados producto de su trabajo.

Días pasados fue nuevamente agredido esta vez por la impericia del propietario de un perro que ingresó de manera intempestiva a su domicilio y ante el peligro al cual se encontró expuesto tuvo que defenderse y defender a sus mascotas, familiares y visitas que se encontraban en el lugar.

Por haber tomado recaudos y accionado hoy se encuentra criticado por medios de comunicación que de manera desaprensiva cargan las tintas sobre su persona sin fijarse el contexto en que se desenvolvieron los hechos y las circunstancias por las que está pasando este comunicador.

Toda mi solidaridad con el amigo, compañero y colega Sergio Corleta y por supuesto Gladis, su señora, en esta feroz campaña de desprestigio desplegada por “periodistas” y medios de comunicación.