“VAMOS A PEDIR QUE EL 25% DE LAS OBRAS PÚBLICAS DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES Y EL 25% DE LAS COMPRAS QUE HACE EL ESTADO ESTÉN EN MANOS DE COOPERATIVAS. DE ESA MANERA SE VAN A FORTALECER LA ECONOMÍA Y LA PRODUCCIÓN POPULAR”, SEÑALÓ MENÉNDEZ.
Los movimientos sociales y grupos piqueteros expresaron que durante los meses de n febrero y marzo habrá movilizaciones programadas para exigir obra pública para las cooperativas y una urgente atención a lo que califican como una situación de emergencia alimentaria, en el marco de una relación “muy tensa” con la administración del presidente Mauricio Macri.
El referente de Barrios de Pie Daniel Menéndez, en referencia a la protesta del 24 de enero dijo que “el Gobierno cambió la política social y la situación es distinta. Nosotros tenemos otro diagnóstico de la emergencia. Por eso nos pareció importante presentar con fuerza nuestro reclamo en las puertas del Ministerio de Desarrollo Social y en el Congreso. Febrero y marzo serán movidos”.
Mañana lunes se espera que la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (Cetep)y Barrios de Pie anuncien día y hora de las próximas movilizaciones. Para Gildo Onorato, secretario de Políticas Sociales del Movimiento Evita, la provincia de Buenos Aires que “tiene ahora 40 mil millones de pesos más” y en la que hay leyes y programas que benefician a los sectores populares “tendrá que responder”.
“Vamos a pedir que el 25% de las obras públicas de la provincia de Buenos Aires y el 25% de las compras que hace el Estado estén en manos de cooperativas. De esa manera se van a fortalecer la economía y la producción popular”, señaló Menéndez.
Por su parte, Onorato destacó que otros ejes que les preocupa son la aplicación de la ley de Emergencia Social -votada en diciembre del 2016 y reglamentada en marzo del 2017- pasará por discutir “cómo se implementa esa ley” y, la voluntad de ingresar al Consejo del Salario Mínimo y Vital que integran el Gobierno, empresarios y la CGT.
La Cetep es una organización gremial que agrupa a trabajadores que están fuera del mercado laboral formal pero perciben un salario que depende de las discusiones en el ámbito del Ministerio de Trabajo que se realizan en junio, en el marco de la ley de Emergencia Social).
Ménendez dentro del triunvirato de los movimientos sociales es considerado un referente en el tema de la emergencia alimentaria, y aunque juntos a sus socios buscaban una ley, en las discusiones con el gobierno a fines del 2017, aceptaron un programa que aún no encuentra aplicación.
En tanto, Cristóbal Cervera, del Frente Popular Darío Santillán -organización que junto a otras más de base se incorporó a las reuniones de los Cayetanos a fines de 2017- destacó la unidad de las organizaciones sociales y reclamó el “fin” de la estigmatización mediática contra los referentes populares.
“Es muy serio lo que hacemos, no sólo intentando paliar el hambre a través de los miles de comedores sino con los empleos genuinos de las cooperativas de trabajo, la contención a los chicos golpeados por la droga y los jardines y escuelas reconocidas oficialmente. Nuestra prioridad es que las condiciones de vida de las familias trabajadoras no sigan empeorando” afirmó y añadió “no queremos más campañas de desprestigio hacia dirigentes sociales y gremiales honestos”.
Cetep es la organización social que tiene entre sus referentes a Juan Grabois- lo que la convierte en la de mejor relación con el papa Francisco. “Vamos a pedir al presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Oscar Ojea y al de la Pastoral Social, monseñor Jorge Lugones que intercedan ante el gobierno para que el diálogo llegue a buen puerto” destacó Onorato.