En Santa Fe murió una mujer quemada por su hijo y en Rosario investigan otro posible femicidio

sufrió tras ser rociada con nafta y prendida fuego.

Romina Leiva permanecía internada en el Hospital José María Cullén, de la capital provincial. El ataque ocurrió el 11 de marzo, en la localidad de Bella Italia, cuando su hijo incendió el auto de la actual pareja de su madre. Cuando ella se interpuso el joven le arrojó nafta y al prender fuego fue alcanzada.

Leiva estaba en pareja con un hombre que mantenía una relación conflictiva con su hijo. El muchacho, de 25 años, había amenazado con atacarlo. El 11 de marzo la mujer estaba en su casa cuando advirtió ruidos de una moto que se estacionaba. Al asomarse comprobó que su hijo buscaba incendiar el auto. Intentó disuadirlo, pero fue atacada.

Su hijo, identificado como Miguel Beresvilj, escapó tras el episodio. Fue atrapado horas más tarde en la localidad de Frontera, en el límite con Córdoba. Aseguró que lo sucedido fue un accidente. La pareja de Leiva, quien ingresó en el hospital con quemaduras en el 80 por ciento del cuerpo –sufrió heridas en el rostro, el tórax, los brazos y la pierna izquierda— declaró que el ataque a la mujer fue intencional.

Beresvilj fue imputado por el homicidio agravado por el vínculo mediando violencia de género, en grado de tentativa, una figura que ahora será ampliada por el femicidio.

La Justicia de Rosario investiga también la muerte de una joven de 30 años que, de acuerdo al testimonio de sus familiares, sufrió heridas fatales tras ser golpeada por su pareja. Aunque un informe médico preliminar indica que falleció a causa de una infección, el hombre permanece demorado mientras se aguardan los resultados de la autopsia.

De acuerdo a la investigación inicial de la fiscalía, Joana Romero ingresó en el Hospital Provincial de Rosario con una infección generalizada en su brazo derecho, lo que provocó su muerte en la tarde del martes.

La mujer le había dicho a sus familiares que fue golpeada por su pareja, un hombre de 44 años. El primer informe médico indica que Romero sufrió una asepsia por infección, lo que derivó en un paro cardíaco. “No se constataron hematomas, traumatismos por golpes o fracturas. No hay indicio de golpes anteriores”, precisó el Ministerio Público de la Acusación.

El hombre se presentó en la comisaría de la localidad de Granadero Baigorria, al norte de Rosario. Fue detenido hasta tener resultados de la autopsia, lo que permitirá resolver su situación procesal.

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No había, según se informó en la Justicia, denuncias previas por violencia de género y no se constató que tuviera antecedentes penales en su contra. Sin embargo, en el área de Género de la municipalidad de Granadero Baigorria recibieron ayer un llamado del padre Romero en el que alertaban sobre golpizas a las que había sido sometido la mujer en los últimos días. La víctima tenía dos hijos de 5 y 7 años.

Los dos nuevos episodios se conocen días después de que el lunes se organizara un ruidazo para visibilizar los femicidios registrados en el país en medio del aislamiento obligatorio provocado por el coronavirus. Desde la medida dictada por el Gobierno y hasta el 29 de marzo se habían confirmado seis casos, aunque podrían sumarse otros que están siendo investigados.