Kioscos, productores y la industria tabacalera advierten por la falta de cigarrillos

ganancia a los comerciantes, les sirven para atraer mayores ventas: en promedio el 50% del ingreso de los kioscos viene de la mano de la venta de cigarrillos.

Mirá también

Mirá también

Coronavirus en Argentina: cómo será la vuelta al trabajo del personal doméstico

Sucede que la producción de cigarrillos se frenó el 20 de marzo y las empresas fabricantes ya utilizaron todo su stock. “Esta semana salió el último camión con mercadería”, confió una fuente de la industria. Con lo cual, los faltantes ya se empezaron a notar porque se trata de productos de alta rotación que no pueden stockearse en gran cantidad.

La Unión de Kiosqueros, (UKRA), envió una nota a las autoridades contando la situación: “notamos con preocupación el faltante de productos esenciales para nuestros comercios, en particular, la creciente restricción en el abastecimiento de cigarrillos. Esto atenta, no sólo contra el objetivo deseado de aislamiento social, porque unos 8 millones de fumadores circulan por distintos kioscos en busca del producto, sino que, adicionalmente, y desde un punto de vista económico, esta escasez perjudica el buen funcionamiento de todos los comercios de cercanía”, apuntó la entidad. Se estima que, en la Argentina, existen unos 100 mil kioskos registrados. Pero llegan a 250 mil en total, según la cámara. Otra boca de venta es el supermercadismo chino. Según Adrian Palacios, titular de la UKRA, “si se prolonga esta situación, se va a profundizar el desabastecimiento y muchos negocios se verán forzados a cerrar”. contó a Clarín.

Mirá también

Mirá también

Coronavirus en América Latina: la pandemia golpea las frágiles economías informales de la región

Paralelamente, la Cámara de la Industria del Tabaco (CIT), que nuclea a los dos fabricas más importantes del mercado (Massalin Particulares y British American Tobacco), también envió su inquietud a las autoridades.

Además de la misma preocupación esgrimida por los kiosqueros en cuanto al abastecimiento, los integrantes de la cadena de producción y comercialización también advirtieron sobre otro aspecto no deseado del faltante de cigarrillos en los kioscos: “si se desabastece a los consumidores de producto legal, se abre una inigualable oportunidad para el comercio ilegal de cigarrillos, con la consiguiente pérdida de recursos tributarios”. Algo que, en tiempos de escasa recaudación, para la AFIP, es una advertencia de peso. Ocurre que la carga impositiva que pesa sobre los cigarrillos es de casi un 80% del precio de venta al público.

“Sólo en 2019, el sector aportó más de $100.000 millones en concepto de Adicional de Emergencia, Fondo Especial del Tabaco, Impuestos Internos, IVA e Ingresos Brutos”, detalló la CIT. “Cada día en que los cigarrillos no salen de las fábricas industriales, dejan de ingresar $700 millones de pesos en impuestos: $90 millones corresponden al Fondo Especial del Tabaco (FET), $2 millones dejan de ser percibidos por las obras sociales sindicales y $610 millones dejan de ingresar en concepto de impuestos nacionales, coparticipación provincial y seguridad social.”

Por eso, desde la cámara pidieron que “se dispongan de los mecanismos para que las fábricas reanuden su producción de inmediato y evitar así que se agraven las situaciones anteriormente descriptas, siempre manteniendo las debidas medidas de protección de la salud”, señaló la industria.

La paralización de la producción por otro lado, también alertó a los productores tabacaleros: unos 50.000 en todo el país, principalmente ubicados en las provincias de Salta, Jujuy y Misiones.

La federación que los agrupa mandó su pedido al ministro de Agricultura, Luis Basterra. “Señor Ministro, entendemos y estamos de acuerdo con todas las restricciones del DNU 297/2020, pero que también establece algunas exenciones para productos que son esenciales para la supervivencia del mercado pero sobre todo para los productores de economías regionales como es el tabaco en el norte del país”. Y finalizó: “si se continua con su distribución aún de manera restrictiva, toda la cadena de valor del tabaco desaparecerá en cuestión de semanas”, alertó.