Abogado y pastor evangélico: quién es el nuevo ministro de Justicia de Brasil

Brasil compartió un culto en el Congreso con diputados del poderoso Frente Parlamentario Evangélico, una de sus más fieles bases de apoyo.

Allí, ante un auditorio repleto de legisladores, asesores e invitados, Bolsonaro oró junto a ellos e hizo un compromiso: nombrar en el Supremo Tribunal Federal (STF), la máxima corte de justicia del país, a un juez “terriblemente evangélico”. Tras los aplausos, todas las miradas apuntaron a André Mendonça.

El ahora nuevo ministro de Justicia de Brasil era antes del Covid-19 y la crisis política y sanitaria que provocó, el principal candidato a reemplazar en el STF a su juez decano, Celso de Mello, quien se jubilará en noviembre al cumplir 75 años. De Mello está en la corte desde 1989, cuando fue nombrado por el presidente José Sarney y su reemplazante será el primero nominado por Bolsonaro en el alto tribunal.

La elección de Mendonça como ministro fue, antes que nada, una gran operación de contención de los daños provocados por las denuncias de Moro contra Bolsonaro. El ex juez se fue del gobierno acusando al presidente de Brasil de intentar interferir en investigaciones que afectan a políticos cercanos y parientes.

Bolsonaro estaba decidido a nombrar en reemplazo de Moro a Jorge Oliveira, ministro de la Secretaría General de la Presidencia y letrado sin el bagaje de Mendonça, hasta ahora Abogado General de la Unión y antes, durante el gobierno de Michel Temer, corregidor en el organismo de contralor del Estado, la CGU.

Cercanos auxiliares de Bolsonaro convencieron al jefe de Estado de no nombrar a Oliveira, quien trabajó con uno de sus hijos en el Congreso. El argumento fue que la designación podría dar fuerza a alegatos de Moro.

Abogado y teólogo, Mendonça es pastor de la Iglesia Presbiteriana Esperança de Brasilia, en la que dejó de predicar por falta de tiempo, y un activo militante contra el aborto que participó, recientemente, de una campaña para que la corte rechazara, como hizo, la legalización de la interrupción del embarazo de mujeres infectadas por el virus del zika.

Activista de causas como incorporar a la enseñanza escolar el fomento al respeto a la policía, se descuenta que el nombramiento de Mendonça no correrá ningún riesgo de ser bloqueado judicialmente, a diferencia del de Alexandre Ramagem al frente de la Policía Federal, que grupos de diputados intentan anular en la justicia.

Ramagem, designado por Bolsonaro nuevo jefe de la Policía Federal, un cuerpo de seguridad de élite del Estado brasileño, es un comisario que asumió personalmente la custodia del presidente cuando, como candidato en el 2018, sufrió un atentado a cuchilladas que casi le costó la vida.

En esa posición se acercó a uno de los hijos de Bolsonaro, Carlos, y ya con Bolsonaro en el gobierno fue nombrado jefe de la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN). Por la cercanía con Carlos, hijo 02 del mandatario, y para evitar dar fuerza a las denuncias de Moro, los auxiliares de Bolsonaro también recomendaron al presidente que evitara el nombramiento de Ramagem, lo que no fue aceptado por el mandatario.

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El nuevo jefe de la Policía Federal, que pese a los cuestionamientos de opositores fue elogiado por Moro el mismo día en que renunció como ministro, llega al cargo en un momento en que los comisarios de la fuerza, una institución prestigiosa, independiente y considerada altamente profesional, reclaman a Bolsonaro compromiso con garantizar su autonomía.

Brasilia, corresponsal