Marcha atrás con la cuarentena: “La gente sintió que podía hacer de todo; comieron asados y visitaron familiares”

y por el peligro de tener circulación comunitaria de coronavirus.

Francisco Echarren, intendente de Castelli, uno de los municipios que decidió retroceder sobre sus propios pasos, explicó los motivos: “Quedan suspendidas las salidas recreativas porque la gente sintió que se podía hacer todo. Se comieron asados y visitaron a familiares, se juntaron el fin de semana que el clima acompañó mucho”.

“Venimos bien, sin casos confirmados ni sospechados, pero el fin de semana nos preocupamos mucho”, comenzó relatando el intendente, quien aseguró que en Catelli se atuvieron a las decisiones tomadas a nivel nacional y consensuadas con el gobernador de la provincia, Axel Kicillof. 

“Habilitamos salidas deportivas y recreativas y ha colapsado todo. La gente ha salido libremente pensando que es el final de este proceso, cuando recién está empezando el pico de contagios”, contó preocupado. 

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En este contexto, el jefe comunal explicó que en Chascomús, que está a 50 kilómetros de Castelli, “hubo un pico de contagios importantes que involucra al hospital”.

Tomando este caso y sumado a las libertades que se tomaron los ciudadanos el fin de semana, es que consideraron dar marcha atrás con la flexibilización. “Teniendo en cuenta que esos trabajadores comparten guardia con profesionales de Castelli, hemos decidido retroceder en las salidas”, explicó Echarren en radio La Red.

En esa línea, justificó: “No podemos permitir que haya una circulación descontrolada y desmedida de gente en una ciudad de 11 mil habitantes con un riesgo de que ingrese el virus”.

El intendente explicó que la ruta 2 es un camino de mucha circulación entre distritos de la región y que en su municipio, aunque no tengan casos positivos hasta el momento, creen que pueden aparecer casos de circulación comunitaria.

Sobre el estado sanitario de Castelli, Echarren contó: “Hace 20 días hemos inaugurado una terapia intensiva con ocho camas. Tenemos nuestro hospital que siempre tuvo alrededor de 38 camas y ahora las duplicamos y estamos por encima de las 70”.

“No tenemos casos positivos y quizás no tenga sentido tomar esta decisión de retrotraer pero creemos que posiblemente tengamos circulación viral”, reflexionó.

Además de Castelli, otros municipios que dieron marcha atrás con la flexibilización en territorio bonaerense son Chascomús y Baradero.

Javier Gastón, intendente de Chascomús, aseguró que, tras cinco nuevos positivos de COVID-19 en una semana, “este es el momento” de “volver atrás” con la apertura y “las caminatas saludables” que se habían permitido. También hubo marcha atrás en Baradero, donde la semana pasada se confirmaron los tres primeros casos.

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JPE