Así lo informó esta noche la Asociación de Concesionarios de Automotores (ACARA) al procesar los datos del último día del mes.
De esta forma, en los
primeros seis meses del corriente año los pantentamientos sumaron 153.099 unidades.
En la comparación intermensual, los patentamientos de junio reflejaron un incremento del 74,3% respecto de mayo, cuando salieron de las concesionarias un total de 21.221 unidades.
Tras darse a conocer las cifras, el presidente de Acara, Ricardo Salomé, resaltó que “tal como se venía adelantando, cuando se produjo la apertura de los salones de venta, la gente sacó turno y visitó las concesionarias con una decisión de aprovechar las bonificaciones vigentes”.
“Eso explica haber podido volver a crecer de forma interanual, luego de 24 meses durísimos de caída ininterrumpida”, expresó el directivo.
No obstante, Salomé advirtió que “no se puede perder de vista que 2020 será un año de casi 200.000 vehículos menos que 2019, que fue un año muy gravoso para el sector”.
Según las estimaciones del sector, el corriente año cerraría con un total de 260.000 unidades, por lo que insisten en la necesidad de contar con un programa de incentivo que permita reanimar las ventas.
Las concesionarias alertaron que la oferta enfrenta “grandes problemas” para reponer los vehículos vendidos, por lo que temen que el sector pueda enfrentar una descapitalización.
Salomé dijo que “ya hay muchos inconvenientes para reponer lo vendido y si la producción e importación no acompañan, en tres meses estaríamos en un estado de descapitalización alarmante por no haber podido reponer 13.000 vehículos del stock”.
“Sería grave detener la demanda por no disponer de vehículos para comercializar, no solo para nosotros, sino también porque cada 100.000 autos que no se patentan son 83.000 millones de pesos menos de recaudación que el Estado deja de percibir”, completó.
Ya en la primera semana de junio, el sector observó la posibilidad de que a lo largo del mes pudieran alcanzar niveles positivos interanuales, lo que finalmente se terminó de confirmar.
Eso sucedió tras la reapertura de las 900 concesionarias que hay en todo el país, por las limitaciones dispuestas en el marco del aislamiento social.
De acuerdo con actores del sector el inesperado crecimiento de ventas responde a un conjunto de factores entre los que se destacan la existencia de una demanda contenida durante dos meses, las escasas alternativas de inversión por la coyuntura económica, los precios en dólares relativos más baratos y las promociones agresivas de las marcas.