Es un negocio casi tan viejo como el la City. Y esto de “coleros digitales” le arrancaría una mueca a algún cambista.
Pero en la Argentina sólo algunas pocas
cosas cambian: incluso en este contexto excepcional de pandemia, un cepo que se reedita en versiones cada vez más rígidas ve nacer a esta conocida fauna financiera, adaptada a los nuevos manejos digitales: los que esperan en las colas de los bancos para comprar los US$ 200 del cupo mensual y por persona y lo transfieren a cambio de una pequeña comisión.
Los bancos se pusieron en alerta. Y el bloqueo de cuentas en dólares, desde ya, sumamente nerviosos a los clientes. “No estamos hablando de dos transferencias de familiares en un mes. Hablamos de una cueva que recibe, por ejemplo, veinte transferencias, de veinte personas distintas“, explica un banquero.
En la práctica, si alguien considera que fue erróneamente penalizado debe saber, antes que nada, que el dinero puede ser retirado, y que en todo caso deberá proseguir un trámite web con la documentación que respalde los movimientos. En casos de más gravedad, el cliente podría ser denunciado ante la Unidad de Información Financiera (UIF).
Aún con el acceso a cantidades tan limitadas, la tentación del billete es grande. Ya sea como ahorro o para hacer “puré” (venderlo más caro en el mercado informal). La brecha entre el dólar solidario (minorista más impuesto del 30 %) y el blue, que llegó a ser del 50%, todavía deja 30 %. Aún es posible hacer una ganancia de aproximadamente $ 5.800 por la diferencia entre ambos precios.
A propósito, comenta un gerente de un banco: en el interior está pasando mucho que la gente después va a retirarlos por cajero automático y a venderlos a una cueva.
Ahora, ¿ahora pueden los bancos intervenir como lo hicieron? Sí. Así lo relataba un ejecutivo de muchos años en la industria: “Nosotros tenemos, primero, una normativa de lavado de dinero muy estricta y, segundo, una política interna basada en recabar la mayor cantidad posible de información sobre el cliente para tener más probabilidades de prevenir operaciones legales.”
“A mi intender -agrega- una de las cosas que hoy pone ruido tiene que ver con la propia pandemia en el sentido de que se abren las cuentas en forma online. En tu casa, agarrás el celular y en tres minutos le sacás una foto a tu documento, una selfie y listo. Esto tiene muchos usos esenciales desde ya pero también facilita algunas avivadas”.
¿Cuál es el criterio exacto? En realidad, el parámetro son los movimientos fuera de lo usual para el perfil del cliente.
“Si una persona hace veinte transferencias a veinte personas distintas en un mismo día y después recibe 20 distintas y retira los dólares claramente no abrió la cuenta para el fin que declaró. Tenemos que dar respuesta y tenemos los elementos para hacerlo. Podemos hacerlo voluntariamente ya que la normativa del BCRA no faculta o hacer la denuncia correspondiente a la UIF en el reporte de lavado de dinero. De hecho, la regulación ni siquiera nos exige que le avisemos al cliente”.
Desde el punto de vista operativo, en una circunstancia como la cuarentena, no parece útil tener cuadras de coleros a principio de mes que usan un cajero que puede necesitar un jubilado o cualquier otro ciudadano.
Otro banquero asegura que le informaron al Central. “Lo sabe y lo que nos recomiendan cerrar la cuenta para limitar un poco la operatoria”.
En el mercado, remarcan un punto que obliga también a cambiar la perspectiva. “Si hay cuevas que están usando a gente que recibió ayuda o líneas subsidiadas y no pueden comprar, seguramente no se lo aclaran”.
Las compras privadas alcanzaron US$ 451 millones en mayo, cifra que casi duplica los US$ 248 millones adquiridos en abril, cuando la demanda ya había se había triplicado contra marzo.
TEMAS QUE APARECEN EN ESTA NOTA
COMENTARIOS CERRADOS POR PROBLEMAS TÉCNICOS.ESTAMOS TRABAJANDO PARA REACTIVARLOS EN BREVE.
CARGANDO COMENTARIOS
Clarín
Para comentar debés activar tu cuenta haciendo clic en el e-mail que te enviamos a la casilla ¿No encontraste el e-mail? Hace clic acá y te lo volvemos a enviar.
Clarín
Para comentar nuestras notas por favor completá los siguientes datos.