La Argentina superó la barrera de los dos mil muertos por coronavirus: con el récord de este miércoles de 82 decesos, llegaron a 2.050. Sin embargo, a medida que la pandemia avanza, la letalidad es cada
vez menor. Ese es, básicamente, el dato más relevante del drama del coronavirus en el país. Al menos por el momento, el Covid ha tenido aquí consecuencias no tan malignas. Cada vez se registran más casos leves, que al mismo tiempo requieren de menor atención en las terapias intensivas de los hospitales.
La gran mayoría de los nuevos infectados puede cursar la enfermedad en su casa o en un centro de aislamiento. Entre los 1.000 y los 2.000 muertos la tasa de decesos bajó del 2,43 por ciento al 1,84 por ciento. Esto es un avance: cada 10 mil personas hoy se mueren 184, cuando antes se morían 243. En el peor momento, el 4 de mayo, llegaron a morirse 536 personas por cada diez mil infectados registrados.
El 21 de junio la Argentina había llegado a los 1.000 muertos en 108 días transcurridos desde el inicio de la pandemia local, el 3 de marzo. Duplicar ese número llevó ahora menos de un cuarto del tiempo, 24 días, pero la buena noticia es que en el mismo lapso la cantidad de contagios registrados creció mucho más, el 170 por ciento, al pasar de 41.204 a casi 111.160. Sólo este miércoles se sumaron 4.250.
Si se desagrega el tiempo de duplicación desde el comienzo, hay otro dato alentador: llegar de 1.000 a 2.000 muertos llevó apenas un día menos que lo que demoró llegar de 500 (el 27 de mayo) a 1.000: 25 días. Pasar de 250 muertes (el 4 de mayo) a 500 llevó 23 días. Y pasar de 125 (el 18 de abril) a 250 demoró apenas 16 días. En la anterior duplicación habían transcurrido, desde el 8 de abril (65 muertes), 10 días. Los primeros 35 días de la pandemia se cobraron 60 muertos.
Del total de decesos, el 49,24 por ciento tuvo lugar en la provincia de Buenos Aires; el 37,5 por ciento en la Ciudad; el 5,89 por ciento, en Chaco; el 2,44 por ciento en Río Negro. El 4,93 por ciento restante ocurrió en las otras 21 provincias. Hay 9 que no registran muertes: Catamarca, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, San Juan, San Luis, La Pampa, Santa Cruz y Tierra del Fuego.
El promedio de edad de los muertos no varíó demasiado con respecto a los primeros 1.000. Es de 73 años. En el caso de los hombres es 70 y en el de las mujeres, 76. Del total, 58,2 por ciento eran hombres y el 41,8 por ciento, mujeres.
El escenario de relativa “levedad” de los enfermos de coronavirus argentinos hace que la demanda de las terapias intensivas no sufran un estrés incontenible. La cantidad de internados en esas unidades de alta complejidad crece lento, aunque sigue siendo el blanco sensible al que prestarle atención. Desde el último sábado hasta este miércoles hubo 81 pacientes más internados por Covid en todo el país. Más del 90 por ciento son del AMBA.
La ocupación general de las terapias intensivas -por cualquier patología-, creció: el último sábado estaba en 58,2 por ciento en el AMBA y ahora se ubicó en el 63,7. A nivel nacional, pasaron del 51,2 por ciento al 53,7. Este es el dato que más importa a las autoridades a la hora de tomar una decisión sobre la flexibilización de la cuarentena: cuál es la capacidad del sistema hospitalario para contener a los nuevos enfermos.
Muertes por coronavirus en Argentina
Fuente: Ministerio de Salud Infografía: Clarín
El ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán, que hasta hace pocos días era uno de los más ortodoxos defensores de la cuarentena dura, este miércoles se mostró mucho más confiado en la posibilidad de una apertura razonable y se basó precisamente en el dato de las camas de terapia intensiva: “Los pacientes internados no crecen tanto como la cantidad de casos”. Eso, según explicó en declaraciones a Telefé, es lo que permite revisar el grado de aislamiento obligatorio que se necesita en el área metropolitana.
Por otra parte, la cantidad de altas (gente curada) se estabilizó luego de pegar un salto de 10 puntos porcentuales en los últimos días. Continúa en el 44 por ciento. Una cifra todavía baja con respecto a la media global, que es del 58,4 por ciento. El incremento en la Argentina se debió fundamentalmente a la implementación de un nuevo algoritmo en la base de datos del Ministerio de Salud de la Nación. El matiz matemático refleja el hecho de que para los enfermos leves ya no es necesario hacerles un test de PCR para darles el alta. Se los considera curados 10 días después del comienzo de los síntomas.
Según las autoridades nacionales y del AMBA, la Argentina está atravesando el pico de la pandemia en este momento. El pico, en todo caso, no es algo que dure un día. La idea de “pico de montaña” como un simple vértice es más bien el rezago de un dibujo infantil. La superficie de esa cumbre tiene unos cuantos metros cuadrados y hay que transitarla antes de empezar a bajar.
La cantidad de casos diarios se había estabilizado en un promedio de 3.600 por día desde comienzos de julio y hasta este martes, con una brecha cada vez mayor entre la Ciudad y la Provincia de más del doble cada jornada. Ahora se superó el límite de los 4.000 y habrá que ver cómo se comporta la curva en los próximos días.
Qué es el CoronavirusCómo se contagia y cómo son sus síntomas

PS
TEMAS QUE APARECEN EN ESTA NOTA
COMENTARIOS CERRADOS POR PROBLEMAS TÉCNICOS.ESTAMOS TRABAJANDO PARA REACTIVARLOS EN BREVE.
CARGANDO COMENTARIOS
Clarín
Para comentar debés activar tu cuenta haciendo clic en el e-mail que te enviamos a la casilla ¿No encontraste el e-mail? Hace clic acá y te lo volvemos a enviar.
Clarín
Para comentar nuestras notas por favor completá los siguientes datos.