Dante Panzeri cumple con una curiosa paradoja: debe ser el periodista deportivo más influyente, pero el menos abordado, el más citado, pero el menos leído. Por eso, que se estrene un
documental que repasa su carrera periodística es una manera de hacer justicia. Buscando a Panzeri, entonces, cubre una ausencia. Y en ese acto justiciero se regodea en aquellos valores periodísticos que parecen haber quedado tan sepultados como el propio Panzeri: rigor, honestidad, valentía, independencia.
Panzeri no era un periodista crítico, ni opositor ni inconformista: era periodista. Y como tal sostuvo sus convicciones. Decía, por ejemplo, que el boxeo era un homicidio legalizado, o que el automovilismo se había convertido en una industria, en un negocio. Y lo decía en la década del 60, cuando el boxeo y el automovilismo eran los deportes más populares después del fútbol.
El documental plantea una búsqueda, la de Sebastián Kohan Esquenazi, un director y productor de cine que después de reeditar el libro Dinámica de lo impensado, la obra emblemática de Panzeri, necesita bucear en la vida y la obra de ese periodista olvidado. Entonces desfilan familiares y colegas, como Ezequiel Fernández Moores, Carlos Ulanosky, Matías Bauso, Diego Bonadeo, Daniel Guiñazú y Tomás Abraham. Con esos testimonios y un riguroso trabajo de archivo arma un rompecabezas de piezas que hasta el momento estaban sueltas.
Panzeri entró a trabajar en la revista El Gráfico a principio de la década del 40 y veinte años después llegó a ser director. Desde ese lugar planteó un periodismo crítico, fundamentalmente con los dirigentes de fútbol. Sus blancos principales fueron Alberto J. Armando, presidente de Boca, y Antonio Liberti, de River, quienes impulsaron lo que definieron como “fútbol espectáculo”, eufemismo que enmascaraba el fútbol como negocio. Panzeri fue implacable: no tenía reparos en enfrentar a los dirigentes más poderosos. La revista pasó a vender la mitad, pero no le importó.
Fue prácticamente el único periodista que se opuso a la organización del Mundial 78. Desde el diario La Prensa planteaba que en ese momento había otras prioridades. Ese lugar lo ubicó en la vereda de enfrente de José María Muñoz, el relator acrítico y obsecuente que quedó como la voz oficial del evento. Panzeri murió el 14 de abril del 78, dos meses antes de la inauguración del Mundial. Queda su obra, y este documental, para recuperar algo de aquel entrañable personaje y mucho del periodismo perdido.
Buscando a Panzeri se puede ver desde el jueves 30 en la sala virtual puentesdecine.com. La entrada tiene un costo de 160 pesos.