Yo tenía un perro que se llamaba León, y yo lo llamaba… León, León, y León venía, pero yo sabía que no era un león, era un perro. … los llamo y vienen, pero yo sé que no son peronistas”, decía Juan Domingo Perón.
Cuadro de situación.
El Peronismo tiene que recuperar la conducción del Partido Justicialista del Chaco y recrear el debate en todas sus dimensiones para enfrentar los cambios que se experimentan en todo el mundo, dar un salto de calidad y desmarcarse de la arquitectura obsoleta en la que quedó atrapado desde el año 2015 sobre todo en el Chaco donde ya por último ni siquiera pudo participar de las elecciones debido a las rencillas internas planteadas por Domingo Peppo y Gustavo Martínez, sin olvidarnos de la alineación con el gobierno de Mauricio Macri que constituyeron el correlato de lo peor de la política representado por Propuesta Republicana y Cambiemos, creo, salvo mejor criterio- que debemos superar esta lamentable etapa donde los peronistas dejamos que un ato de tránsfugas tome por asalto la herramienta electoral del movimiento revolucionario.
El vaciamiento ideológico del peronismo.
El mundo enfrenta desafíos sumamente importantes en los cuales el Partido Justicialista tiene la obligación de convertirse en sujeto de debate, recrear la propuesta y avanzar hacia el futuro superando viejos esquemas, dilatar este cuadro de situación es sumergirse en un proceso de agonía del que será difícil culminar sin heridas de graves consecuencias. Una masa importante de cuadros se vio obligada a migrar a otras fuerzas políticas y en algunos caso recrear nuevos espacios para poder militar sin las ataduras corporativas que fueron anquilosando su estructura hasta convertir la herramienta electoral del movimiento revolucionario que fundara Juan Perón en una cascara vacía sin fundamentos filosóficos ni cimientos doctrinarios e ideológicos
El partido una estructura del sistema cooptada por un club de amigos.
Sin dudas la conducción actual del justicialismo encarnada en la figura del ex gobernador Domingo Peppo terminó de exponer la crisis de representatividad, se ausentó del debate político debido al vaciamiento ideológico que debilita la estructura y paraliza la militancia, ya no propone sino que solo junta a un grupo de amigos que más allá de los intereses económicos y ambiciones politiqueras se ve incapaz de enfrentar los desafíos con propuestas de contenidos superadores, a la marcha y el bombo hay que anexarle el debate sobre el rol del justicialismo frente a las nuevas tecnologías que transformaron la manera de hacer política, ya no alcanza con el engrudo y la pegatina, además del folclore hay que sumarle propuestas para un debate serio sobre la producción y el trabajo, educación, seguridad, Derechos Humanos, las nuevas políticas de género por citar solo algunos ejes de la discusión que se desarrollan en la comunidad mientras el partido justicialista se encuentra encorsetado, sin ideas, presa de un autismo que debería movilizar a la militancia para recuperar la autoridad política y superar el desbande y la anarquía y volver a hacer política, fuera del alcance de los círculos y grupos de poder que atrasan el reloj de la historia.
Las nuevas tecnologías, y las nuevas formas de actuar en la sociedad.
Más allá del protocolo que exige la pandemia, se debe ir construyendo el proceso interno que instale una nueva conducción que represente al conjunto, con la autoridad política, promoviendo la movilización de las bases, este proceso podría comenzar por instalar un Equipo de Conducción que enfrente la emergencia mientras se prepara el llamado a elecciones internas para reemplazar de manera institucional las autoridades del Consejo Provincial, juntas locales y departamentales, el Congreso Provincial importante ámbito de debate interno, como decía Juan Perón… “La acción está siempre por sobre la concepción, porque en este tipo de preparación de multitudes lo que hay que presentar en un punto de partida. Construir la unidad de concepción, para que esa unidad de concepción, consecuente en la marcha del tiempo, vaya realizándose con absoluta unidad de acción…”
Por último.
Quiero decir que tenemos una responsabilidad ineludible ante la historia, las luchas que protagonizó la Militancia Peronista no merece prolongar este despropósito, nuestros compañeros apresados, torturados y desaparecidos no merecen esta triste realidad porque muchos compañeros seguimos creyendo que construir una patria justa, libre y soberana con un Pueblo feliz con paz, pan y trabajo es posible.