“Hay cosas que son insostenibles”, lanza un dirigente larretista, horas después de que el jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta criticara, a su estilo, algo más que la reforma judicial.
Su posición pública aludió a la ofensiva del Gobierno sobre la Justicia, que incluye no solo el proyecto de reforma que esta semana será tratado por el Senado sino además la creación del Comité Asesor del presidente Alberto Fernández para modificar la Corte Suprema, el Consejo de la Magistratura y el Ministerio Público Fiscal.
El interrogante es a quién estuvo realmente dirigido el mensaje del referente del PRO. ¿A Alberto Fernández o a los halcones de Juntos por el Cambio y a los que participaron del banderazo?
La definición de Rodríguez Larreta no es menor. El sector duro de Juntos por el Cambio pero también parte de los manifestantes del banderazo, cuya principal consigna era “contra la impunidad de Cristina”, le venía reclamando al alcalde de la Ciudad una posición contundente.
“Lo que Horacio pide es más tiempo para poder trabajar en una propuesta seria, sumando más gente, haciendo algo más amplio que lo que está”, explican en su entorno.
Sí quedó clara la alusión, aunque sin nombrarla, a Cristina Kirchner. Ya que es la vicepresidenta la principal promotora no sólo de la ofensiva judicial sino del impulso en el Senado para que se apruebe sin sobresaltos.
En relación con el Gobierno, en el larretismo interpretan que así como marcha el debate del texto judicial el choque es inevitable, incluso reeditando lo que denominan “la 125 dos”. Ocurre que el miércoles las redes convocaron a una vigilia y el jueves, durante la sesión, protestar en las afueras del Congreso.
Parten de la premisa de que el Frente de Todos no tiene el número de votos necesario en la Cámara de Diputados para convertirlo en ley. De hecho, en Juntos por el Cambio la cuenta que hacen es 129 en contra y 125-127 a favor.
“Hay cosas insostenibles como el aumento miembros de la Corte, tener cuidado con ampliar los juzgados federales de Comodoro Py al extremo, el traspaso de la justicia penal a la Ciudad y que esten los fondos”, indican los larretistas.
El interrogante, en función de la muy buena sintonía que tiene Rodríguez Larreta con Alberto Fernández, es si el Presidente estaba al tanto o conocía la posición del jefe de gobierno porteño. Enigmáticos, cerca de la autoridad máxima de la Ciudad afirman: “Creo que Alberto debe estar de acuerdo con esta posición”.
Hacia adentro, en Juntos por el Cambio, aseguran que “Horacio tenía que exponer su posición”, pero niegan que hubiera acordado con Mauricio Macri, Patricia Bullrich, Alfredo Cornejo, Mario Negro o Elisa Carrió el texto del tuit que publicó.
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