Facundo Astudillo Castro: la zona donde apareció la mochila había sido rastrillada

target=”_blank” alt=”facundo-astudillo” href=”https://www.clarin.com/tema/facundo-astudillo.html” target=”_blank” title=”facundo-astudillo”>Facundo Astudillo Castro (22), encontrada en la tarde del sábado en el estuario bahiense. En su interior, había dos teléfonos y el carné de conductor de joven, hallado muerto el 15 de agosto muy cerca de allí.

El equipo fiscal que investiga la desaparición forzada dio “instrucciones precisas” respecto de cómo debía actuarse con el elemento que fue rescatado por un pescador. Este domingo, el testigo era acompañado por una comisión de la PFA y Leandro Aparicio, uno de los abogados de la mamá de Facundo, al sitio donde encontró la mochila.

Trascendió que los aparatos hallados dentro serían un Blackberry y un Nokia, como los que utilizaba Facundo. Además estaba su carné de conductor, al que el oficial de la Bonaerense Alberto González le tomó una foto, a las 15.43 del 30 de abril, cuando lo interceptó, según declaró, a la altura del kilómetro 750 de la ruta nacional 3. En ese sitio, le requisó la mochila antes de dejarlo seguir viaje.

No se informó si también estaba el DNI que portaba Facundo y que fue fotografiado por los policías Mario Sosa y Jana Curuhinca, que lo interceptaron a las 10 de la mañana del 30 de abril en el acceso a Mayor Buratovich. “Algunos bolsillos aún no habían sido abiertos“, aclaró un vocero consultado por Clarín.

Por el momento, no se prevé ningún rastrillaje del lugar donde apareció la mochila, un recodo de la ría de Bahía Blanca, de características cambiantes de manera cotidiana por el sistema de mareas.

“Solo se realizará una geolocalización el sitio para determinar su posición exacta e incorporación a la causa”, dijeron fuentes judiciales. Más adelante, se solicitará un “ADN touch” como el que se le practicará a la zapatilla de Facundo, para determinar si hubo manipulación.

Tampoco está dispuesto un reconocimiento por parte de la mamá de Facundo, que recibió la novedad el sábado a la tarde después de culminar una pintada y pegatina de afiches en varios sitios de Pedro Luro. Incluyeron la ex estación de trenes, donde su hijo se reunía con sus compañeros del programa Jóvenes con Memoria y paredes donde habían colocado murales, que luego fueron quitados.

El hallazgo se lo comunicó el subcomisario José Pérez, segundo jefe de la Policía Federal en Bahía Blanca. “Ya antes de encontrar los restos de Facu yo dije ‘ellos tienen sus cosas’. En lugares donde se rastrilló siguen apareciendo sus cosas, nunca me equivoqué, lo que nunca hicieron fue decir la verdad, ratas”, escribió después Cristina Castro (42) en Facebook.

Antes de la aparición de la mochila con los teléfonos, Aparicio reveló que se había detectado un movimiento de la línea de Facundo el 1 de mayo, 24 horas después de su desaparición. Destacó que ese mismo día, en el móvil de la agente Siomara Flores, figuraba una captura de pantalla del Facebook de la mamá del chico.

Dijo además Aparicio que la actualización del teléfono del chico ubicaba su señal en cercanías de Pacifico 281 de Bahía Blanca, donde está la Unidad de Prevención de la Policía Local (UPPL). Allí el 25 de agosto fue secuestrado el patrullero 20.610, que registró “movimientos inusuales y sospechosos” el 8 de mayo, según un informe de la Dirección General de Asistencia Operacional de Asuntos Internos del ministerio de Seguridad bonaerense.

Las últimas incorporaciones de pruebas a la causa federal, que ya supera las 3.800 fojas, se vinculaban precisamente con ese móvil policial. Por caso, la DATIP proporcionó imágenes del AVL que ubican al Toyota Etios, dominio OMP 782 “en las cercanías” a la zona del hallazgo del cuerpo de Facundo.

Además, en un reporte de la UPPL bahiense enviado a la fiscalía, consta que ese 8 de mayo el móvil cargó combustible a las 15.55 en una estación de servicio ubicada en el kilómetro 696,5 de la ruta nacional 3. Coincide con el AVL que, 10 minutos antes, lo ubica a 7 kilómetros de Villarino Viejo, donde apareció el cadáver, según reportó la PFA.

Aquel día, el patrullero estuvo detenido durante 35 minutos a unos 800 metros del sitio específico del hallazgo, como consignó el informe de Asuntos Internos. La secuencia de georreferenciación del vehículo “da un salto de más de 10 kilómetros en apenas 41 segundos, para volver con otro salto luego de 3 horas 38 segundos al recorrido de rutina en apenas 28 segundos”.

Respecto de ese auto, aún sigue pendiente el análisis del trozo de cobertor del asiento trasero retirado, tras la marcación que realizó el perro Yatel, del adiestrador y perito de parte Marcos Herrero. La finalización de esa pericia, iniciada el 2 de setiembre en la delegación bahiense de la PFA, quedó trunca, por la decisión del equipo fiscal del jueves 3, de correr a esa fuerza, momentáneamente, de la investigación.

Aún sigue pendiente además el peritaje al patrullero 49.477 asignado a la subestación Policía Comunal de Mayor Buratovich y también secuestrado. Hacia una camioneta similar a esa, blanca con franjas azules, estacionada sobre la banquina de la ruta 3, tres testigos vieron cómo dos policías subían a Facundo el 30 de abril, entre las 15.30 y las 16, en las afueras de Mayor Buratovich.

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EMJ