Carolina Castro, la única mujer en la cúpula de la UIA, criticó el impuesto a la riqueza y la Ley de Teletrabajo

Teletrabajo, que fue aprobada a fines de julio.

En una entrevista con el canal Todo Noticias, Castro se refirió a la importancia de construir políticas en base al “diálogo social”, del que deberían formar parte tanto la oposición como el oficialismo.

La empresaria reconoció que “tendemos a declamar mucho más el diálogo social de lo que después lo practicamos”, y en ese sentido incluyó a “todos, oposición, Gobierno, empresarios y sindicalistas”.

Un caso que evidencia esa realidad es la Ley de Teletrabajo. “Dimos una visión del mundo empresario respecto de muchas cosas negativas de la ley, y la ley salió sin ningún cambio relevante. Es una ley que afecta a cómo se va a dar trabajo en un sector de la sociedad en particular, y cada vez más grande desde la pandemia”, explicó.

También cuestionó el impuesto a las grandes riquezas. Puso el ejemplo de “una persona que tiene que pagar por este aporte unos 14 millones de pesos”.

“De esos 14 millones, 10 millones corresponden al patrimonio que tiene en las acciones de su empresa, y los otros 4 millones corresponden a sus bienes personales. Creo que está mal que se tributen esos 10 millones sobre un bien productivo, porque ese bien es una inversión que esta persona hizo en el país para darle trabajo a la gente”, argumentó.

Castro integra el Comité Ejecutivo de la UIA como segunda prosecretaria, un cargo que ocupa en representación de AFAC, la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes.

Este lunes participó de la reunión en la Casa Rosada convocada por el Gobierno entre sindicalistas , empresarios y dirigentes sociales. 

A su vez, se desempeña en Industrias Guidi, una autopartista que tiene plantas industriales en Burzaco y Zárate, fundada por su abuelo y presidida por su madre.

También tuvo un paso por la función pública, al frente de la Subsecretaria de Políticas y Gestión de la PyME, durante el gobierno de Mauricio Macri, y presidió Diálogo UIA Joven.

“Siento que estoy ahí porque aporto mi mirada industrial a los temas, no por el cupo femenino”, dijo sobre su cargo en la UIA.

A su vez, consideró que el empresariado argentino tiene una mirada “no tan positiva” por parte del resto de la sociedad.

“La mayoría de las sociedades desarrolladas tienen sectores privados muy fuertes. Y si uno mira la territorialidad de Argentina, te das cuenta que aquellos lugares con menor densidad empresarial son los lugares con menos necesidades básicas satisfechas”, indicó.

“Que no haya una valoración de la importancia de tener empresas pymes y empresas grandes es un tema sobre el cual tenemos que trabajar todos”, agregó.

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