El canciller Felipe Solá ordenó intempestivamente el regreso del embajador argentino en China, Luis María Kreckler. Su decreto de vuelta ya está firmado.
La decisión
se dio mientras el Gobierno negocia con China la compra de millones de dosis de la vacuna de Sinovac. Y también se conversa con la empresa china Sinopharm, por la compra de 11 millones de vacunas que llegarían en marzo.
“Estamos en tratativas con proveedores como la Sinovac y Sinopharm de China, donde mañana (por el viernes) voy a tener una videoconferencia ya que llevamos 5 meses de negociación. Con Sinovac tenemos una carta de intención ya firmada con el Instituto Butantan que la produce”, afirmó el jueves el ministro de Salud, Ginés González García.
La vacuna de Sinopharm
La vacuna fue desarrollada por el CNBG (China National Biotech Group), afiliado al China National Pharmaceutical Group (Sinopharm), en colaboración con el BIBP (Instituto de productos Biológicos de Beijing).
En Argentina, unos 3.000 voluntarios de entre 18 y 85 años, que no hayan tenido el virus, están participando en un ensayo clínico en fase 3 para evaluar su seguridad y eficacia. La mitad recibió las dos dosis de la vacuna y la otra mitad un placebo.
El estudio es organizado por la Fundación Huésped -encabezado por su director científico, el infectólogo Pedro Cahn– junto a integrantes del comité científico de Vacunar.
El presidente de Sinopharm, Liu Jingzhen, informó que 56 mil personas que recibieron la vacuna contra el coronavirus como parte de aplicación dentro de la autorización del uso de emergencia y viajaron al exterior de China no se infectaron.
La agencia reguladora emiratí, donde se hicieron ensayos de Sinopharm, dijo que parecía tener una efectividad del 86%, según datos preliminares de los ensayos clínicos.
La vacuna de Sinovac
La vacuna CoronaVac, fabricada por la compañía biofarmacéutica Sinovac, también está en ensayos clínicos en fase 3.
Podrá aplicarse masivamente a principios del próximo año, estimó el presidente de la farmacéutica, Yin Weidong. Asegura que tienen capacidad para fabricar cerca de 300 millones de dosis al año.
China aprobó el uso de emergencia de esta vacuna candidata, al igual que Emiratos Árabes y Bahrein.
De acuerdo a la revista científica The Lancet, se conocen datos de 144 participantes en la fase uno y 600 en la fase dos de los ensayos clínicos, por lo que la vacuna es “adecuada para uso de emergencia”.
En Brasil se realizaron ensayos clínicos con 13.000 voluntarios. El viernes pasado, dos millones de estas vacunas arribaron a San Pablo, cuyas autoridades solicitarán al gobierno de Brasil una autorización de emergencia para comenzar a inmunizar en enero.
El estado de Sao Paulo anunció este miércoles que la vacuna de Sinovac alcanzó la eficacia y seguridad mínimas requeridas para su uso, aunque no precisó los respectivos niveles.
Por su parte, Turquía anunció este jueves que pronto recibirá las primeras unidades de la vacuna. Las autoridades aseguraron haber comprobado una eficacia del 91,25% en resultados preliminares, ya que las pruebas de la fase 3 siguen realizándose en ese país con 7.371 voluntarios.
¿Cómo funcionan?
Ambas vacunas de origen chino –Sinovac y Sinopharm – usan virus inactivados. Lo que hacen es cultivar el virus en laboratorios. Luego, utilizan partículas virales muertas para exponer al sistema inmunológico al virus de Covid-19, sin riesgo de una enfermedad grave.
Es un método tradicional que se utiliza con éxito en muchas vacunas conocidas, como la de la rabia.
La tercera vacuna china
Además, en Argentina se está probando otra vacuna china, desarrollada por el Beijing Institute of Biotechnology, CanSino Biologics Inc.
Una vez más, es la Fundación Huésped la que encabeza el ensayo clínico, de fase 3, que será llevado adelante en 11 centros de salud en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y Mar del Plata. En total, en Argentina serán reclutadas 8.000 personas.
El infectólogo y director científico de la Fundación Huésped, Pedro Cahn, aseguró que la vacuna de CanSino es un sistema similar a la de AstraZeneca, a la de Gamaleya (Sputnik V) y la vacuna de Janssen. Todas tienen en común que están montadas sobre un adenovirus.
Una de las ventajas de la vacuna de CanSino Bio es que contempla una sola dosis, que se conserva a entre 2 y 8 grados, lo que facilita la logística en caso de mostrar buenos resultados en el estudio de Fase 3.
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