¿Por qué la policía de Washington no pudo impedir el asalto al Capitolio?

en el emblemático edificio para impedir la certificación de los votos y la ratificación de la victoria de Joe Biden en las elecciones del 3 de noviembre.

Los incidentes, que dejaron cuatro muertos y decenas de heridos y detenidos, hicieron saltar las alarmas en la capital del país, donde congresistas, políticos y expertos mostraron su indignación ante la aparente poca seguridad desplegada en torno al Capitolio de cara a una jornada de especial relevancia.

Si bien las fuerzas de seguridad apuntaban la semana pasada a un detallado plan para mantener a salvo el Congreso mientras se certificaba la victoria de Biden, lo ocurrido el miércoles fue calificado por muchos como un “fracaso” policial.

Entre ellos se encuentra el presidente de la Comisión de Asignaciones de la Cámara de Representantes, Tim Ryan, encargado de supervisar la financiación destinada, precisamente, a la Policía del Capitolio.

Según explicó en declaraciones a la cadena CNN, “claramente se registraron fallos enormes, de carácter estratégico y de planificación por parte de la Policía del Capitolio, así como de los sargentos de armas y de todos aquellos que tuvieran un papel relevante a la hora de coordinar una defensa de este tipo”.

El político demócrata, congresista por el estado de Ohio, matizó así que no estuvieron a la altura de un lugar como el Capitolio de Estados Unidos para una jornada “fundamental para el proceso electoral”. Además, recordó que está prohibido acudir a la plaza colindante y que nadie tiene acceso a las escaleras del edificio.

¿Qué pasó con los 2.000 agentes?

Para la mayoría es un misterio cómo los casi 2.000 agentes del Capitolio -que cuentan con una financiación de 515,5 millones de dólares- no lograron proteger con éxito el Congreso. Es por ello que Ryan ha sugerido que habrá cambios en la jefatura de la Policía.

“Está claro que hay mucha gente que se va a quedar sin trabajo muy, muy pronto por culpa de este asalto embarazoso”, advirtió.

Además, los legisladores llamaron a abrir una investigación al respecto. Zoe Lofgren, congresista por el estado de California, lamentó que la situación “haya hecho saltar todas las alarmas y haya sembrado dudas sobre la seguridad” en el Capitolio.

En este sentido, garantizó que tanto representantes como senadores abordarán esta cuestión durante los próximos días a pedido de la Comisión de Administración de la Cámara de Representantes, que ella misma preside.

Vandalismo y robos

El grupo de seguidores trumpistas dejó tras de sí ventanas rotas y pequeños hurtos, como el denunciado por el senador demócrata Jeff Merkley, que aseguró que los “saqueadores” robaron una de sus computadoras portátiles que se encontraban en su despacho.

“Rompieron la puerta, la sacaron de las bisagras”, relató en un video difundido en su cuenta de Twitter. Así, explicó que “arrancaron las cosas de las paredes” y se llevaron la computadora. El senador aseguró que su oficina fue saqueada e insistió en que “se pueden ver incluso escombros en el suelo”.

En una rueda de prensa, el jefe de la Policía Robert J. Contee explicó que se incautaron de cinco armas tras la detención de los sospechosos. Ninguno de ellos era residente de Washington.

Por su parte, el fiscal general de Washington, Karl Racine, señaló que que la “decepción” proviene, en realidad, de los agentes a nivel federal.

“Los policías de Washington, francamente, hicieron su trabajo. Ayudaron a la Policía del Congreso a restituir el orden y arrestaron a la gente que estaba violando el toque de queda”, sostuvo. “Los que nos decepcionaron fueron nuestros colegas a nivel federal”, dijo.

Racine detalló, además, que los agentes a nivel local carecían de la jurisdicción necesaria para presentar cargos por la mayoría de delitos cometidos, una tarea que recaería sobre las fuerzas federales.

Sin embargo, los videos difundidos a través de las redes sociales apuntan a una presunta complicidad por parte de los agentes, que aparecen sacándose fotos con los seguidores de Trump o ejerciendo escasa resistencia a la entrada del Capitolio.

Más efectivos de la Guardia Nacional

La Guardia Nacional ha decidido desplegar a otros 6.200 efectivos en Washington para ayudar a los agentes sobre el terreno.

Está previsto que desde el estado de Nueva York lleguen 1.000 efectivos, mientras que Maryland y Nueva Jersey enviarán a unos 500 cada uno, según revelaron a la CNN fuentes del Departamento de Defensa, que señalan que otros estados, como Pensilvania, Delaware y Virginia también enviarán efectivos.

Así, permanecerán en Washington durante un plazo de 30 días para garantizar la seguridad del Capitolio y el área colindante más allá del 20 de enero, fecha de la toma de posesión de Biden. Anteriormente, la Guardia Nacional había desplegado 1.100 efectivos en respuesta al asalto del Capitolio.

Por su parte, la alcaldesa de la ciudad, Muriel Bowser, informó que en total son 68 las personas detenidas durante el asalto, 36 de ellas por violar el toque de queda, 25 por saltarse el toque de queda e irrumpir en el Capitolio, cinco por posesión ilegal de armas de fuego y otras dos por posesión ilegal de otro tipo de armas.

Fuente: DPA

CB

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