La actriz rosarina que triunfa interpretando a una estrella porno en serie brasileña Hard

una industria del género enfocada en la mujer. Y ahí “se despliegan sensibilidades negadas dentro del porno tradicional comandado por hombres”, dijo.

En una entrevista con Telam, la actriz relató su experiencia. “Soy argentina, católica, vengo de una familia tradicional con padres que estuvieron casados toda la vida, así que para interpretar a Shana, mi personaje, tuve que quitar primero mis propios tabúes, que eran demasiados, y entender que existe una industria que es maravillosa y cada vez crece más”, dijo.

Hard es la remake de una historia que se filmó en Francia hace más de 12 años, y cuenta la historia de Sofía (Natalia Lage), un ama de casa de clase alta que renunció a su carrera de abogada para cuidar a sus dos hijos.

Reciente viuda, Sofía ve cómo su vida perfecta se desmorona: su marido le mintió sobre su profesión y la herencia que le dejó no es una compañía de tecnología, sino una productora de películas pornográficas que lleva su nombre, SofiX, y donde también trabaja su suegra.

Escandalizada primero y seducida por la posibilidad de revolucionar el negocio de su marido poniendo el foco en las fantasías ocultas de mujeres de clase alta como ella, Sofía se atreve a convertir en realidad las fantasías de sus clientas.

Gemidos, lubricantes, métodos de profilaxis, dilatación anal, legislación vigentes y fetiches son algunas de las temáticas que aborda estaserie por Rodrigo Meirelles y estrenada en mayo de 2020 en la plataforma.

La ficción propone un acercamiento desprejuiciado en clave de comedia al detrás de escena de una de las industrias millonarias más tabú del mundo.

En Hard, Shana es una actriz porno argentina, casada con Conrado, junto a quien comenzó a grabar y compartir sus experiencias swinger antes de que la pareja se convirtiera en una dupla profesional del cine XXX.

“Mi personaje es una mujer que se anima a hablar de sexo con total naturalidad porque es su trabajo y es tan abierto su mundo que no tiene que esconder nada”, cuenta la actriz. “Ella es madre, se mudó de un país a otro, conoció al amor de su vida, trabaja con el sexo y lo puede contar de una manera muy amorosa y quitarnos el tabú al resto”.

Dal Molin también interpreta una de las hermanas de Diego Maradona en la serie Maradona: Sueño bendito que se estrenará en Amazon.

“Shana enseña eso, que es todo más simple, que trabaja con sexo porque le gusta, porque usa esa herramienta que es su cuerpo, como hacemos los actores, y que se atreve a contar algo mas”, agregó.

Natalia contó cómo fue la preparación para realizar su personaje: “Acá en Brasil se prepara mucho la parte actoral y eso fue una bendición. Tuvimos una preparadora de elenco y los actores compartimos con actores porno reales que participaron de la serie. Conocer su mundo fue mágico. Empezamos a trabajar con respiraciones, nuestros gemidos, sonidos libidinales y ellos decían que su trabajo es al revés: el hombre se toca, la mujer se estimula y van a la escena”.

Con el personaje de Shana, la actriz descubrió un mundo, hasta entonces desconocido para ella. “De la industria porno yo conocía muy poco, solo lo que me gusta o me provoca placer, pero hay muchas cosas, sobre todo en SofiX, en que se cumplen fantasías. Empecé a entender nuevas fantasías. Para la serie se acercaron unas chicas de la industria porno y ahí pude ver un montón de sensibilidades negadas dentro del porno tradicional, porque es el hombre el que dirige, el que comanda”.

Consultada sobre la mirada desde una perspectiva femenina en un mundo comandado por los varones, Dal Molin explica: “En estos nuevos episodios se va a mostrar que hay un montón de fantasías maravillosas que se pueden cumplir y disfrutar, sobre todo nosotras. La serie se hizo en 2018 y en este tiempo aprendimos un montón”.

Por otra parte, la actriz reflexiona sobre la relación con los cuerpos, la imagen y los prejuicios y las diferencias que existen entre la Argentina y Brasil. “La Argentina es muy obcecada con el cuerpo y se preestablece que el cuerpo deseable tiene que ser de una sola manera. Acá en Brasil todo el mundo se pone su brillantina, se decora y se entrega, la mujer joven, la grande, se muestra, baila, se mueve y tienen la bisexualidad muy conversada“.

Y agrega: “Son más abiertos creo. Incluso los niños son muy fluidos, vienen más libres que nosotros que tenemos generaciones de mentiras e hipocresía encima”.

WD

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