En los casi siete años que lleva como técnico de River, Marcelo Gallardo ha dado muchas muestras de que es un técnico que se reinventa constantemente. Ha
armado varios equipos y jamás se ató a un sistema de juego, por más que tenga sus preferencias de unos sobre otros. Ahora, que parece haber dejado atrás -al menos por el momento- la línea de tres/cinco en defensa, buscará afianzar la línea de cuatro y jugar con un volante más en el mediocampo, algo que le venía faltando al equipo.
Ese mediocampista es Agustín Palavecino, quien entró muy bien en el plantel y en el ritmo de juego de River y, tras convertir un gol en el Superclásico y tener una gran actuación frente a Godoy Cruz, se ganó la titularidad. Si le suma más despliegue y recuperación a su juego, el Muñeco tal vez encuentre en él al representante de Exequiel Palacios, un jugador clave que River perdió cuando fue transferido al Bayer Leverkusen en diciembre de 2019.
La presencia de Palavecino en el equipo le permite a River oxigenar el mediocampo, tener un mayor y mejor circuito de pases y lograr que Enzo Pérez no quede tan desprotegido. El propio Pérez, en la final de la Supercopa Argentina que River le ganó a Racing a principios de este mes, se acercó en un momento al banco de suplentes cuando el partido todavía estaba 1-0 y le dijo que faltaba un jugador en la mitad de la cancha. Al rato, el Muñeco puso a Palavecino. Y se destrabó el trámite. Empezaron a aparecer los espacios y River goleó. Enzo se sintió más cómodo. Si hasta él pudo armar la jugada del segundo gol y asistió a Julián Álvarez.
Gallardo y Palavecino en La Bombonera. (Marcelo Carroll)
Con Palavecino en cancha, Enzo Pérez y De la Cruz parecen sentirse más cómodos. Pero también hay otra cuestión que la presencia del ex Platense y Deportivo Cali le permite a Gallardo: armar la línea de cuatro en defensa y darle la posibilidad al entrenador de utilizar sus sistemas más predilectos, que pueden variar en 4-1-3-2, 4-3-1-2 o 4-3-3, de acuerdo a la posición que ocupe uno de los atacantes, en este caso Julián Alvarez.
Ante Godoy Cruz, dadas las bajas que tenía por diferentes motivos (Gonzalo Montiel, Fabrizio Angileri, Milton Casco, Robert Rojas y Javier Pinola), Gallardo colocó una defensa inédita con Alex Vigo, Paulo Díaz, Jonatan Maidana y David Martínez. Y respondieron. El domingo, ante Racing, pueden haber algunas variantes de nombres (Casco jugaría por Martínez y -si se termina de recuperar- Montiel irá por Viga, sino seguirá como titular el ex jugador de Colón) pero no de sistema.
Montiel puede volver este domingo. (AFP)
Es que la línea de tres/cinco, con tres marcadores centrales y dos laterales-volantes, de a poco va quedando archivada. Al menos como sistema principal. Quizás Gallardo le eche mano en algún partido específico en el que evalúe que sea más conveniente jugar de esa manera o cuando no tenga a los intérpretes adecuados en el mediocampo por alguna razón, ya sea lesiones o suspensiones.
La idea de Gallardo es afianzar la línea de cuatro. Y el cuarto lugar del mediocampo, el Muñeco lo tenía pensado para Jorge Carrascal, que también le da la opción de jugar como extremo izquierdo. Sin embargo, el colombiano por ahora no s enganchó. Y en el último partido, Álvarez se quedó con ese lugar.
A diferencia de Carrascal, el cordobés ofreció facilidades para asociarse al circuito de juego. Más allá de no tener el desequilibrio individual del colombiano, supo adaptarse mejor a las necesidades de Gallardo y demostró su versatilidad táctica.
En Mendoza, Álvarez comenzó jugando detrás de Rafael Borré y Matías Suárez, pero delante de la línea de Enzo Pérez, De La Cruz y Palavecino. Sin la responsabilidad de ser enganche ni tampoco delantero, el joven de 21 años actuó con libertad del centro a la derecha y le causó muchos problemas a la defensa de Godoy Cruz.
Álvarez puede ocupar varias posiciones en ese rol: como extremo, detrás de los delanteros, y retrocediendo para ser cuarto volante. Práctico para resolver y funcional al trabajo colectivo, es prácticamente seguro que será nuevamente titular el próximo domingo, cuando River reciba desde las 18.30 a Racing, por la séptima fecha de la Zona “A” de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol.
Ante el equipo de Juan Antonio Pizzo, Gallardo aplicaría por tercer partido consecutivo el mismo sistema de juega y de esa manera buscará afianzar a la línea de cuatro.