En el marco de la crisis sanitaria que soporta Santa Cruz, acrecentada por la pandemia de coronavirus, se filtró el crudo diálogo entre dos médicos de la
provincia durante el cual uno de ellos le advierte al otro que “le importa un pedo” si se muere una paciente embarazada durante su traslado en la ambulancia.
Este martes la ginecóloga de Gobernador Gregores, Grisel Riquelme, le avisó al jefe de Ginecología del hospital Regional de Río Gallegos, Sergio Sesnic, que estaba enviando de urgencia en una ambulancia a una paciente embarazada diabética que atravesaba el empeoramiento de su cuadro clínico.
La insólita respuesta llegó por WhatsApp: “Si hablaste con clínica médica o terapia de adultos, me mandás la paciente. Si no, así como viene la paciente, se va a volver a ir a Gregores. Se les morirá en la ambulancia, me importa un pedo“, le respondió el jefe del área a Riquelme.
El Hospital Regional de Río Gallegos, donde un médico dijo que no iba a recibir a una embarazada que era trasladada. /Foto Web/
Entre Gobernador Gregores y la capital santacruceña hay 453 kilómetros. Para entonces eran las 20 y la ambulancia estaba en la ruta con la paciente.
Aunque Sesnic tiene varias denuncias informales por maltrato ante sus subordinados, según relató Riquelme a Infomedia 24, la sorpresiva contestación se encuadra también en el colapso sanitario que atraviesa la provincia conducida por Alicia Kirschner.
Finalmente Riquelme no hizo caso de la advertencia de su colega y ordenó a la ambulancia que siguiera hasta Río Gallegos. La paciente no ingresó al área de Ginecología a cargo de Sesnic, pero fue derivada a Médica Clínica donde permanece internada.
“Yo que él me recluiría en mi familia, y pensaría muy bien la profesión que estoy ejerciendo porque si no te importa que una paciente viaja 500 kilómetros y la vas a rebotar; y no te importa si se muere, bueno, replanteate tu carrera”, señaló Riquelme.
La provincia acumula 40.595 casos y 640 muertos desde el principio de la pandemia. Casi la mitad son de Río Gallegos. Hay 1.627 casos activos y la gran mayoría pertenece a la capital provincial. El hospital local tiene 14 camas de terapia intensiva todas ocupadas en estas horas. Hasta el momento se han distribuido 33 mil vacunas.
La dirección del hospital regional de Río Gallegos mantiene en plena pandemia un fuerte conflicto con los camilleros y enfermeros de la institución. Los paramédicos reclaman material sanitario básico para poder trabajar, además de vacaciones, descanso, horas extras por feriado y mejoras salariales.
Esta semana se han registrado movilizaciones y reclamos. El personal sanitario llegó a hacer una caravana dentro del hospital. “El gobierno provincial quiere ajustar por el sector enfermería”, aseguró Manuel Piris, representante de los enfermeros del hospital a La Prensa de Santa Cruz.
La semana pasada dos camilleros fueron suspendidos, acusados de amedrentar a la subsecretaria de Salud, Laura Beveraggi, y a uno de los directores médicos, Mauricio Fernández.
DD