Washington (corresponsal).- El Fondo Monetario Internacional mejoró este martes las expectativas económicas para la Argentina y pronosticó que este año el país crecerá un 5,8%
en lugar del 4,5% que estimaba en enero. También presentó un panorama más optimista para el empleo: la desocupación rondaría 10,6%.
El organismo presentó el tradicional Informe de Perspectivas Económicas Globales (World Economic Outlook o WEO) en el marco de la Asamblea de Primavera del Fondo y el Banco Mundial, que habitualmente nuclea a centenares de funcionarios de todo el mundo en Washington, pero que esta vez se lleva a cabo en forma virtual por la pandemia.
En el reporte, revelado en una conferencia por la economista jefa del organismo, Gita Gopinath, el FMI proyectó un crecimiento de la economía global de un 6% este año, (medio punto porcentual más de lo previsto hace tres meses), luego de una contracción histórica de -3,3% en 2020.
Si bien el Fondo señala que el panorama continúa incierto por la propagación de distintas cepas del virus y la instalación de nuevas restricciones en varios países, el organismo ve como alentador el avance de la vacunación en varias naciones, aunque advierte que la inmunización no sucede al mismo ritmo en todos los rincones del planeta.
Gita Gopinath, economista jefa del Fondo Monetario Internacional, fue la encargada de difundir las cifras de crecimiento esperado del organismo para el mundo. Foto AFP
En las estimaciones país por país, el Fondo estimó un crecimiento del PBI argentino de 5,8% para 2021 y de un 2,5% para el 2022. El pronóstico es bastante más optimista que el calculado en la última actualización, en enero pasado, cuando estimaba que la Argentina crecería 4,5% este año.
Si bien el Fondo no señaló los motivos de la mejora de su pronóstico para la Argentina, se estima que se basa en el alivio de gran parte de las restricciones por la pandemia, los resultados de una buena cosecha, la suba de precios de las materias primas y la estabilidad cambiaria de los últimos meses.
El crecimiento pronosticado por el Fondo es un poco más conservador que el estimado por el Banco Mundial la semana pasada, de un 6,4% para este año.
Puntos suspensivos y asteriscos
También este lunes se anunció una mejora en la proyección de la tasa de desempleo en la Argentina ya que el FMI calculó ahora que en 2021 será de un 10,6% en lugar del 11,4% previsto en enero. Para el año que viene estiman que rondará un 9,3%.
No hubo perspectivas de inflación para Argentina. En el apartado destinado al efecto, para el país solo aparecen unos puntos suspensivos y un asterisco que aclara que las variables fiscales y de inflación no están incluidas porque se encuentran “ampliamente ligadas a un programa de negociación que está aún pendiente”.
Este año, el encuentro de Primavera (boreal) del Fondo Monetario se hará de manera virtual. Foto AFP
El organismo está en pleno proceso de refinanciación de la deuda argentina de unos 44.000 millones de dólares y se estima que el Gobierno busca estirar la negociación más allá de las elecciones legislativas de octubre para no tener que implementar estos meses ciertas medidas de ajuste fiscal que exigiría un nuevo programa.
Si bien una mejora de las perspectivas económicas podría en teoría estimular mejores condiciones para una pronta firma de un acuerdo, también le daría al Gobierno más aire para afrontar los vencimientos de los próximos meses sin tanto apremio por pactar un programa.
Qué pasará en el mundo
Sobre el panorama global, Gopinath señaló que las perspectivas de crecimiento más alentadoras se dieron principalmente por “mejoras en las economías avanzadas, sobre todo en Estados Unidos” (1,3 puntos porcentuales), que se espera que crezca un 6,4% este año.
Otras economías poderosas, incluida la zona del euro, también repuntarán este año, pero a un ritmo más lento. Entre los mercados emergentes y las economías en desarrollo, el Fondo prevé que China crezca este año un 8,4%.
Entre los países de América latina, el organismo pronostica que Perú será el que más crecerá este año (8,5%), mientras que Chile lo hará un 6,2%, Colombia un 5,1%, Brasil un 3,7% y Uruguay un 3%. Venezuela continuará con números alarmantes: una caída del PBI de -10%, aunque en ascenso desde el -30% del 2020.
Pese a los pronósticos más optimistas, el Fondo advierte, sin embargo, que el ritmo de recuperación global no será uniforme y que “estas vías de recuperación divergentes creen brechas más amplias en el nivel de vida de los países en comparación con las expectativas previas a la pandemia”, dijo Gopinath.
Se prevé que la pérdida anual promedio del PBI per cápita durante 2020-24, en relación con las previsiones previas a la pandemia, será del 5,7% en los países de bajos ingresos y del 4,7% en los mercados emergentes, mientras que en las economías avanzadas se proyecta que las pérdidas serán menores al 2,3%.
“Se están revirtiendo los avances en la reducción de la pobreza y se espera que unos 95 millones de personas más caigan en la pobreza extrema en 2020, en comparación con las proyecciones prepandemia”, dijo Gopinath.
El Fondo resaltó también que debe haber equidad en el acceso a las vacunas. “Los países deben trabajar juntos para garantizar la vacunación universal. Si bien algunos países llegarán a inmunización generalizada este verano (boreal), la mayoría, especialmente los países de bajos ingresos, probablemente tendrán que esperar hasta finales de 2022”.
“Acelerar las vacunas requerirá aumentar la producción y distribución, y también agilizar la exportación, financiar plenamente al COVAX, ya que muchos países de bajos ingresos dependen de esas dosis y de que se garanticen transferencias mundiales equitativas del exceso de vacunas”, dijo la economista.
NE