Brasil registró este martes por primera vez más de 4.000 muertos por coronavirus en 24 horas, en una interminable espiral ascendente que augura un abril más sombrío
que marzo, hasta ahora el mes con más decesos por la pandemia.
El país, de 212 millones de habitantes, contabilizó 4.195 muertos, de acuerdo a las cifras oficiales. Sin embargo, el recuento que hace el consorcio de los principales medios brasileños eleva a 4.211 el registro de este martes.
El lamentable récord se produce seis días después de la última marca letal: 3.869 decesos el 31 de marzo.
Entierro de un muerto por coronavirus en San Pablo, Brasil. Foto Reuters
De esta manera, el total de fallecidos por coronavirus aumenta a 336.947 desde la llegada del Covid a Brasil, en febrero de 2020.
Este martes se contabilizaron además 86.979 nuevos contagios, llevando la cifra total a 13,1 millones, según los datos del Ministerio de Salud.
Brasil es el segundo país con más muertos y con más contagios, superado solo por Estados Unidos.
En los primeros seis días del mes, el número de fallecidos asciende a 15.432, manteniendo la tendencia de marzo, el mes más letal hasta ahora, con 66.573 muertos, más del doble del récord anterior.
El promedio diario sobre siete días es de 2.757 fallecimientos, el más alto en el mundo en este momento.
Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, país inmerso en una profunda crisis por la pandemia del coronavirus. Foto Bloomberg
Vacunación lenta, reclamos de expertos y futuro sombrío
Los especialistas afirman que en las próximas semanas el país podría atravesar un escenario más oscuro, con los hospitales desbordados, la vacunación avanzando a paso lento y el gobierno de Jair Bolsonaro rechazando la aplicación de una cuarentena, argumentando que perjudica la economía.
La campaña de vacunación, que comenzó de forma lenta en enero y fue objeto de una disputa política, avanza en los últimos días aunque sin garantizar aún la cantidad necesaria de dosis para aumentar el ritmo actual.
Hasta la fecha, 20 millones de personas (9,8% de la población) recibieron la primera dosis y 5,8 millones (2,7% de la población), la segunda.
“Con el ritmo de vacunación actual, la única forma que tenemos de disminuir esa circulación tan acelerada del virus es un confinamiento efectivo“, dijo la epidemióloga Ethel Maciel, profesora de la Universidad Federal de Espíritu Santo.
La experta aseguró que no son suficientes las “medidas de restricción dictadas en los estados”, ya que -al mismo tiempo- esos mismos estados definen “varias actividades como esenciales para mantenerlas abiertas”.
Casi un 10% de los brasileños recibieron una dosis contra el coronavirus. Pero no es suficiente. Foto AFP
El incremento de muertes está generando escenas difíciles en ciudades como San Pablo, la más rica y poblada del país, donde fueron habilitados micros escolares para cargar cuerpos y se están realizando entierros nocturnos para atender la demanda.
“Es lamentable la situación en que nos encontramos y no estamos viendo medidas efectivas ni por parte del gobierno federal ni por los estados. Lamentablemente esa tensión política entre los gobiernos regionales y el federal nos trajo adonde estamos hoy, con ese enorme número de personas que perdieron sus vidas”, dijo la profesora Maciel.
En términos relativos, el país registra en promedio 160 muertos por 100.000 habitantes, una cifra inferior a la de República Checa (254/10.000), Reino Unido (187/100.000) o Estados Unidos (168/100.000).
Pero los promedios de varios estados dan la magnitud de la tragedia: en Rio de Janeiro, llega a 220 fallecidos cada 100.000 habitantes.
No solo la variante Manaos
Entierro de una víctima de Covid en Manaos, en enero. La variante P1 no es el único motivo del alza de muertes. Foto EFE
Brasil comenzó el año con escenas de horror en el estado Amazonas (norte), con hospitales colapsados y la muerte de decenas de personas por falta de oxígeno.
Con una tasa de mortalidad de 292 por 100.000 habitantes, especialistas sostuvieron en aquella época que la aparición en el estado de una nueva variante, llamada P1, favoreció la rápida propagación del virus.
La pregunta es si esta variante está por detrás del incremento de casos y muertes que vive Brasil.
“Como Brasil no está secuenciando ampliamente, podemos especular pero no podemos estar seguros de cómo la nueva variante contribuye en el escenario que estamos viviendo”, dijo Mauro Sanchez, epidemiólogo y profesor de la Universidad de Brasilia.
“Sabemos que la nueva variante es más transmisible y algún papel debe estar jugando. Ciertamente [la situación actual] es una combinación de la circulación de nuevas mutaciones, de nuevas variantes, con el comportamiento de las personas de no obedecer las restricciones”, agregó.
Con información de AFP
AFG
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