Por Magda Ayala| Intendente de Barranqueras
Somos muchos los que hemos escuchado y aprendido desde muy pequeños que el trabajo es la herramienta que dignifica a toda persona. Desde mi hogar como también dentro de mis primeros pasos en el ejercicio de la política, reconozco como un elemento fundamental el rol de los trabajadores en el fortalecimiento de nuestra patria.
Quienes nos embanderamos en el peronismo, aprendimos y comprendemos que en un país como el nuestro, que tiene gran potencial de crecimiento y en algunos aspectos, todo por hacerse, debemos unirnos y hacer del trabajo nuestro motor fundamental.
Sabemos muy bien que existe una situación económica mundial llena de incertidumbres, signada por las consecuencias de una pandemia que todavía intentamos sobrellevar, sin fórmulas ni teorías infalibles, sino con la fuerza de nuestra convicción de salvaguardar la salud de todos y todas, cuidando también toda fuente de trabajo.
Caminé cada barrio, y llegué a cada uno de los hogares de mi ciudad para conversar con mis vecinos. Permanezco presente allí, y en cada muestra de cariño y de apoyo, , encuentro la fortaleza necesaria para continuar en esta tarea para nada sencilla que es conducir los destinos de mi localidad para ponerla, de una vez y para siempre, de pie.
Y por eso, a pesar de lo difícil de la situación económica que nos toca atravesar en Argentina y el mundo, no podía dejar de hacer llegar mi cálido saludo y más profundo agradecimiento a cada uno de los trabajadores y trabajadoras de mi ciudad, quienes con gran compromiso y entrega, asumieron la enorme tarea diaria de seguir adelante cada uno desde su lugar, dándole batalla a todas las crisis que tenemos afuera acechando.
Quiero agradecer especialmente a la Familia Municipal, a esos grandes hombres y mujeres que permanecieron en actividad garantizando los servicios indispensables, que son muchas veces trabajadores anónimos pero incondicionales. También, mi reconocimiento a cada uno de los comerciantes, pescadores, comunicadores, educadores y emprendedores, que no bajan los brazos en esta lucha. A todos ellos quiero volver a recordar que aquí tienen a una intendente dispuesta a acompañarlos y apoyarlos con todo lo que tenga a su alcance.
Trabajamos juntos, unidos. Algunos desde sus hogares, otros en las calles, pero siempre atentos a las medidas necesarias para cuidarnos y cuidar al otro.
Aún en el contexto más adverso, trabajamos. Y eso nos hace dignos.
En este día del trabajador, hago llegar mediante estas líneas, mi más sincero saludo y agradecimiento a cada trabajador y trabajadora, con la firme convicción de que, permaneciendo juntos, estaremos mucho mejor y lograremos construir la ciudad que queremos para nosotros y nuestros hijos.
¡Feliz día, trabajadores!