La Iglesia católica, a través de la Comisión Nacional de Justicia y Paz, pidió hoy que «se convoque a los jujeños y jujeñas a participar en un diálogo paciente y ordenado» sobre la reforma de la Constitución en Jujuy y que «el resultado de ese diálogo sea sometido a un plebiscito vinculante».
Lo hizo a través de un documento en el que consideró «legítimo que quienes estén en desacuerdo con normas incluidas en esa Constitución» sometida a reforma por el gobierno de Gerardo Morales «reclamen ser escuchados».
La Comisión, dependiente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), destacó el llamado de monseñor César Fernández, obispo de Jujuy, quien instó «al diálogo sincero entre las autoridades y los distintos grupos de hermanos y hermanas que se encuentran en conflicto» y dijo que «todo se puede lograr con el diálogo y todo se pierde cuando la palabra cede el paso a la violencia«.
«Pedimos que se convoque a todos los jujeños y jujeñas a participar en un diálogo paciente y ordenado acerca de sus normas y que el resultado de ese diálogo sea sometido a un plebiscito vinculante», enfatizó.
Tras señalar que «la sanción de una nueva Constitución en la provincia de Jujuy ha originado movilizaciones en todas las ciudades y pueblos jujeños» por parte de diversos sectores sociales, incluidas «instituciones de nuestra Iglesia», la Comisión dijo que «el gobierno ha prohibido esas manifestaciones y reprimido y detenido manifestantes, alegando que eran personas que estaban realizando actos de violencia«.
«Recordamos que la Doctrina Social de la Iglesia señala que ‘consecuencia característica de la subsidiaridad es la participación, que se expresa, esencialmente, en una serie de actividades mediante las cuales el ciudadano, como individuo o asociado a otros, directamente o por medio de los propios representantes, contribuye a la vida cultural, económica, política y social de la comunidad civil a la que pertenece’», advirtió.
Y destacó que «‘la participación es un deber que todos han de cumplir conscientemente, en modo responsable y con vistas al bien común. La participación no puede ser delimitada o restringida a algún contenido particular de la vida social, dada su importancia para el crecimiento’».
La Comisión de Justicia y Paz consideró que «toda persona que habita nuestra Patria puede y debe participar. En este caso se trata de la Constitución que regirá la comunidad jujeña en su desarrollo y desenvolvimiento y consideramos legítimo que quienes estén en desacuerdo con normas incluidas en esa Constitución reclamen ser escuchados«.
«También creemos que es urgente que todos respondan al reiterado llamado de monseñor César Daniel Fernández, obispo de Jujuy, ‘al diálogo sincero entre las autoridades y los distintos grupos de hermanos y hermanas que se encuentran en conflicto. Hay que detenerse para escucharnos pacientemente. Hay que construir puentes a recorrer para encontrarnos y no dinamitarlos. Todo se puede lograr con el diálogo y todo se pierde cuando la palabra cede el paso a la violencia. Es fatigoso el camino del diálogo, pero hay que transitarlo y escucharnos pacientemente haciendo lugar a las distintas voces de los actores de nuestra vida social’», abundó.
En consecuencia, dijo la Comisión, «con ese objetivo pedimos que se convoque a todos los jujeños y jujeñas a participar en un diálogo paciente y ordenado acerca de sus normas y que el resultado de ese diálogo sea sometido a un plebiscito vinculante«.
Fuente Tiempo Argentino