“Te informaron mal, Patricia. Este año en CABA ya tuvimos 85 días de clases”, escribió en sus redes la ministra Soledad Acuña, en respuesta a la precandidata a presidenta de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, que arremetió contra la política educativa de Rodríguez Larreta. Como si se tratara de un tema cuantitativo, el ejecutivo porteño logró instalar la idea en la sociedad que, a mayor cantidad de días de clases, mejor calidad educativa reciben cientos de miles de estudiantes. En una interna que crece día a día, Bullrich decidió meterse con uno de los caballitos de batalla que el ejecutivo porteño utiliza como campaña electoral, pese al desfinanciamiento y ajuste que existe en el sector educativo.
La precandidata de Juntos por el Cambio afirmó que “Solamente Mendoza, San Luis y Santiago del Estero tuvieron más de 80 días de clases en lo que va del año, mientras que la provincia de Buenos Aires solo tuvo 62 y la Ciudad de Buenos Aires, 71.”, sentenció Patricia Bullrich, “¿Saben por qué?”, siguió en sus redes: “Por medidas de fuerza de los sindicatos docentes, que hicieron llegar a 20 los días de paro en Chubut y 28 en Misiones. Si no cambiamos esto de raíz, la decadencia seguirá y no habrá futuro para los chicos de Argentina”, agregó Bullrich y termina con su frase de campaña: “Conmigo, esto se acaba”.
Rápidamente, la titular de la cartera educativa porteña, Soledad Acuña, salió replicar la afirmación de la candidata de Mauricio Macri. “Te informaron mal, Patricia. Este año en CABA ya tuvimos 85 días de clases. Nuestro calendario escolar es el más extendido del país, 192 días, y lo estamos cumpliendo. Los paros en Ciudad no suman ni el 20 % de acatamiento y la mayoría de docentes no adhirió a medidas de fuerza”.
Lo cierto es que, ni los paros docentes, ni los días feriados: La principal causa de pérdida de días de clases en la Ciudad es la carencia de docentes. En junio de 2022, Tiempo alertó sobre la falta de maestros y maestras en el distrito, una situación que afecta a los diferentes niveles educativos.
En aquel entonces, el recorte realizado por este medio fue en dos semanas de clases, con cifras oficiales obtenidas de la base de datos de la plataforma de Actos Públicos de la Ciudad. Cada jornada de acto público quedó con un promedio de 450 cargos vacantes sin cubrir y hubo casos de estudiantes de escuelas primarias que llegaron a tener 15 maestras distintas en solo 4 años. Ante esta situación, en septiembre de 2022, la legisladora porteña del Frente de Todos, Maru Bielli, lanzó un contador de horas sin clase por falta de docentes en CABA: en dos semanas relevaron 20.235 horas en donde miles de estudiantes de secundarios porteños no tuvieron jornada escolar, y un promedio diario de casi 200 cargos docentes sin cubrir en el nivel primario. El mayor déficit de profesores se da en idiomas, Física, Química y Matemática y hay escuelas que durante todo un año transitan materias sin cubrir.
Bielli sostiene que “el gran problema es que en la Ciudad faltan docentes. Por ejemplo, en primaria quedan 1587 horas semanales en promedio sin cubrir de Inglés. En secundaria, 707 de idiomas”, sentenció en sus redes sociales.
Ante la carencia de docentes, la diputada porteña, elaboró en 2021 un proyecto integral para abordar la emergencia de maestros. En ese documento propuso un conjunto de medidas destinadas a dar respuesta a la falta de maestras para cubrir cargos en el nivel primario y de profesores para ocupar horas cátedra en el secundario.
La respuesta de los gremios docentes
Desde los sindicatos porteños, también salieron a responder a las mandatarias del PRO: “Mientras las dirigentes de Juntos por el Cambio juegan a ver quién disciplina más a los docentes, en CABA, en lo que va del año, en más de 100 edificios escolares hubo al menos un día de suspensión de clases por problemas de infraestructura o de plagas”, destacó Pablo Francisco, secretario de la Comisión de Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo CyMAT de UTE-Ctera.
El dirigente sindical destaca que esta situación “implica más de 1500 horas de clases perdidas, y más de 20 mil estudiantes afectados. Falta de agua, de luz, escapes de gas, caídas de techos, ratas en aulas. Esto es resultado de la baja presupuestaria en educación que aplica Juntos por el Cambio en la ciudad hace 15 años”.
Fuente Tiempo Argentino