La máxima autoridad en materia electoral de Guatemala ratificó este miércoles que habrá balotaje presidencial el 20 de agosto, aunque sin confirmar si sus participantes serán Sandra Torres y Bernardo Arévalo, mientras un juzgado penal ordenó la suspensión de la personería jurídica del partido del último, informaron fuentes oficiales.
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) evitó oficializar los resultados de los comicios de primera vuelta del 25 de junio, dominados preliminarmente por Torres y Arévalo, pese a que el lunes último la Corte Suprema de Justicia dio por cerrada la revisión del escrutinio sin cambios de relevancia.
Asimismo, la medida adoptada por el Juzgado Séptimo de Instancia Penal y anunciada horas después por el Ministerio Público (MP) se limitó a la situación del partido, sin aclarar si el candidato podrá seguir aspirando a ser el presidente de la república.
“El Tribunal Supremo Electoral (TSE) continúa con las actividades correspondientes para preparar la logística de la segunda vuelta electoral, a realizarse el 20 de agosto, tal como se definió en el Decreto de Convocatoria número 1-2023 del TSE”, publicó el organismo en sus redes sociales.
Estaba previsto que el Tribunal diera este mediodía los resultados definitivos de los comicios del 25 de junio, pero se limitó a difundir ese comunicado.
“Estamos haciendo todo nuestro mayor esfuerzo para seguir garantizando la custodia del voto. Sigan confiando en la autoridad electoral”, agregó el TSE, que citó a su titular, Irma Palencia.
El tribunal aún discutía impugnaciones presentadas por fiscales de los partidos que quedaron fuera de la segunda vuelta.
Ese posicionamiento del TSE coincidió con la filtración en medios guatemaltecos de una solicitud del Ministerio Público de documentación relacionada con el Movimiento Semilla, la formación de Arévalo.
Esto último quedó develado esta noche, cuando la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) del MP informó que, por pedido suyo, el Juzgado Séptimo de Instancia Penal ordenó la suspensión de la personería jurídica del Movimiento Semilla.
La resolución se debió a “un nuevo caso de corrupción e impunidad, denominado Corrupción Semilla”, explicó el jefe de la FECI, Rafael Curruchiche, en un video divulgado en redes sociales, según los diarios guatemaltecos Prensa Libre y Soy 502.
El funcionario explicó que todo se originó en mayo de 2022, cuando “un ciudadano denunció haber sido adherido ilegalmente al Movimiento Semilla” y se comprobó que “la firma y letra fueron falsificados”.
Curruchiche agregó que “existen indicios de que posiblemente más de 5.000 ciudadanos fueron adheridos ilegalmente al Movimiento Semilla, falsificándole su letra y firma”, y que se estableció que al menos “12 personas fallecidas” fueron afiliadas a esa agrupación.
En las elecciones generales celebradas el pasado 25 de julio, Sandra Torres (15,86%) y Bernardo Arévalo (11,77%), hijo del expresidente reformista Juan José Arévalo (1945-1951), fueron los más votados entre los 22 aspirantes.
En una entrevista concedida más temprano a la Federación Guatemalteca de Escuelas Radiofónicas, Arévalo afirmó que las autoridades electorales dilataban la oficialización de los resultados porque no querían que Semilla empezara su campaña.
Torres, candidata de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), inició de hecho su actividad proselitista para agosto.
Varios partidos alegaron supuestas irregularidades y la Corte de Constitucionalidad impidió al TSE oficializar los resultados hasta que se realizara un cotejo de las actas electorales, trámite que fue cumplido y que reveló apenas cambios menores en el número de votos de cada fuerza.
Fuente Telam