
El Banco Central del Uruguay (BCU) colocará esta semana tres títulos de deuda pública doméstica con diferentes vencimientos, por 13,4 millones de pesos, en medio de la Semana de Carnaval que comenzará con dos feriados laborables.
La primera licitación de la semana comenzará este miércoles 14 a las 14:00 horas, se licitará el primer título en pesos por 5.000 millones de pesos (casi 127,48 millones de dólares) con un plazo a 26 días, con un vencimiento fechado para el lunes 11 de marzo del año corriente. En ese total, 1.000 millones de pesos (casi 25,5 millones de dólares) serán colocaciones no competitivas y tendrá su fecha de integración el mismo día.
El jueves 15 a las 14:00 horas, se adjudicará título en pesos por 4.200 millones de pesos (un total de 107,08 millones de dólares) con un plazo de 90 días, y un vencimiento fechado para el 15 de mayo de este año. El mismo tendrá la fecha de integración el mismo día. Esta licitación tendrá 840 millones de pesos (21,42 millones de dólares) de colocaciones no competitivas.
Por último, el viernes 2 de febrero a las 14:00 horas, se licitará el último título en pesos de la semana, por otros 4.2000 millones de pesos (casi 107,08 millones de dólares) con un plazo a 168 días, y un vencimiento fechado para el 2 de agosto de este año. Del total, 840 millones de pesos (casi 21,42 millones de dólares) serán colocaciones no competitivas. En tanto, la fecha de integración será el mismo día.
El año pasado la deuda soberana alcanzó su máximo histórico
El porcentaje de deuda en moneda local en el total de la deuda del Estado de Uruguay alcanzó el máximo histórico del 55,9% en diciembre del año pasado, en sintonía con la estrategia de gestión de deuda que lleva adelante el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
La Unidad de Gestión de Deuda (UGD) del MEF publicó el Reporte de Deuda Soberana, en el cual figura un dato alentador e histórico para el país: el porcentaje de deuda en moneda local alcanzó el 55,9%, el máximo nivel registrado hasta el momento, impulsado por un mayor financiamiento en pesos tanto en el mercado doméstico como en el internacional; así como por el efecto de precios relativos.
Según indicó la UGD en el reporte trimestral correspondiente a noviembre y publicado a comienzos de diciembre del año pasado, el gobierno “siguió dando pasos significativos en la desdolarización de la estructura de la deuda, reduciendo la vulnerabilidad a la volatilidad de la moneda”.
Estos resultados se enmarcan dentro de la estrategia de gestión de deuda que el MEF viene llevando a cabo como pilar de la política de endeudamiento, a través de la emisión especial de deuda doméstica en forma de Notas del Tesoro en Unidades Indexadas (UI), en pesos nominales (UYU) y en Unidades Previsionales (UP).
A su vez, es parte de las recomendaciones que el directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) realizó para el país en su evaluación anual, en términos de avanzar con mayor velocidad hacia la desdolarización de la economía.
Tras la crisis del 2022, el porcentaje de deuda en moneda local no llegaba al 20%, y así se mantuvo hasta el 2007, cuando esta proporción quedó algo por debajo del 30%. En 2012, 2013, 2014 y 2022, este porcentaje superó el 50% del total.
La importancia de este dato histórico es que cuanto mayor sea el porcentaje de deuda en moneda local, menor es el riesgo de descalce de monedas. El gobierno recibe casi la totalidad de sus ingresos en pesos, por lo que ante un aumento repentino del dólar, si su endeudamiento está mayormente en pesos, tendrá menos inconvenientes para hacer frente a esos pagos.
Fuente Ambito