El periodista, reconocido por su capacidad para innovar, contó paso a paso cómo se forjó su vínculo con la tecnología. Desde la llegada de la ZX Spectrum en 1977 hasta estos días, con la inteligencia artificial en la conversación. Claro que en el medio aparecieron la casetera doble, internet, programas de edición multipista, el mail y las ideas televisivas y radiales.
Justamente al vincular cada uno de esos aspectos, a Pergolini se le ocurrió que Vorterix podía ser transmitido en vivo, como un streaming. Pero hace 14 años. “No se enamoren de una idea. Uno puede tener una gran idea, pero puede no ser el momento y piensa que el mundo está equivocado”, reflexionó.
Luego de disertar, fue entrevistado por Federico Mayer, de Club AgTech. Fue entonces cuando se metió de lleno en el vínculo de la tecnología con el mundo empresarial y las personas. “La tecnología hackea al ser humano”, sentenció.
A ello agregó: “Según las edades y otros factores, uno detecta las claves del negocio, analiza cómo unos y otros avanzan, pero no hay que tenerle miedo a la tecnología y tenemos que probarla. Antes creíamos que había un único público y cliente, pero ya no es así”.
“El campo cambió la tecnología implementada, con cosechadoras, fertilizadoras, semillas, sensores y con el paso del tiempo el productor entendió que no alimenta a una población, sino a una muy variada población. Es clave hablarle a cada individuo de ese público”, señaló.
Llegada de la inteligencia artificial
Pergolini profundizó en lo que vendrá al incorporar a su discurso un concepto en boga: la inteligencia artificial. “Chat GPT ya lo tenemos incorporado, ya sabemos cómo funciona, no nos sorprende ni nos asusta”, empezó.
Y añadió: “Hay robots que tienen una antropomorfología como la nuestra para adaptarse a nuestro mundo. Van a hacer cualquier cosa: cuidar a nuestros hijos, cocinar, limpiar, trabajar, ser nuestros empleados y hasta nuestros reemplazos. Da un poco de miedo y hasta podría no llamarnos tanto la atención que de un día para el otro estemos hablando con uno de estos bichos”.
Para concluir, el ex conductor de Caiga Quien Caiga puso sobre la mesa otra idea concreta de proyección: “Se viene una etapa de conversación con la inteligencia artificial. La educación para los más jóvenes va a tener que ver con la adaptación, con otro tipo de preparación, con gente que haga buenas preguntas porque vamos a tener buenas respuestas. Pero para hacer buenas preguntas, hay que estar informado. Tenemos que enseñarles a cuestionarse porque las máquinas nos van a dar buenas respuestas. La tecnología es buen siervo, pero va a ser un jefe temible”.