Ese campo es manejado por la familia Losano y fue presentado como un caso de éxito en zona del ecosistema El Espinal.
Tras la bienvenida y el desayuno, Analía Frandino del Nodo Sinergia B (N. de la R: los nodos propiciados por Ovis XXI son organizados a partir de egresados de la Especialización en Manejo Holistico) hizo una presentación del Establecimiento El Jagüel.
“El tema central fue la ganadería regenerativa y ese contexto como ingresa el manejo holístico en un contexto de cambio climático y aumento de temperatura y de perjuicios que nos afectan a todos como sociedad y como productores”, indicó a TodoAgro, el ingeniero Franco Moretto, profesional del Nodo Sinergia B.
“En esta ganadería regenerativa se captura carbono, se regenera el suelo y se trata de imitar a la naturaleza en base a pasturas polifíticas, y a tratar de incorporar al árbol en los sistemas, es decir apuntando a una producción resiliente con uso bajo o nulo de insumos, y es ahí donde entra el manejo holístico como una estrategia de planificación para integrar los ejes productivos, sociales, ambiental y económico”, indicó Moretto.
Las praderas polifíticas son aquellas en la que convive pasturas que están conformadas por varias especies forrajeras, incluso de distintas familias como gramíneas, leguminosas, asteráceas y brassicáceas, con el objetivo de brindarle a los animales una dieta variada de alta calidad forrajera; al suelo la oportunidad de expresar su máximo potencial y al productor una alternativa rentable y sustentable de producción a largo plazo.
A media mañana se concretó un conversatorio y rueda de preguntas y se realizó un recorrido a campo por El Jagüel. Se pudo observar y comprobar el incremento en los niveles de captura de carbono y la regeneración de suelo y esto genera nuevas oportunidades para los productores. “Desde el año pasado el programa Sara impulsa la adhesión de productores a esta idea para ser redituados económicamente”.
El Programa Sara ofrece un ingreso económico a productores agropecuarios que regeneran sus tierras. “Esto es posible a través de prácticas de ganadería regenerativa, que permiten recuperar la biodiversidad, mejorar la infiltración de agua y capturar carbono en el suelo”, puntualizó Franco Moretto.
El programa es propiciado por una startup llamada Ruuts (ver ruuts.la) que busca premiar económicamente a productores agropecuarios por regenerar sus tierras y revertir la desertificación de sus campos. “Hoy buscamos regenerar millones de hectáreas en América Latina, regenerar 3 millones de hectáreas en la Patagonia y 500 mil hectáreas en Sudamérica”, destaca en su página web que subraya que en la Patagonia lleva el nombre de POA y desde el Río Negro hacia el norte es programa Sara.
Cuando se instrumenta el manejo holístico a nivel predial que significa respetar 10 principios, que se citan a continuación:
1-La naturaleza funciona como un todo.
2-Entiende el ambiente que estás manejando.
3-El ganado puede mejorar la salud de la tierra.
4-El tiempo es más importante que el número de animales.
5-Define qué es lo que estás manejando.
6-Define qué es lo que quieres.
7-El suelo desnudo es el enemigo público número uno.
8-Juega con todas las cartas.
9-Revisa tus decisiones.
10-Monitorea tus decisiones.
Mediante esta estrategia y adhiriendo al programa Sara se obtienen beneficios ingresos adicionales a la producción ganadera como por ejemplo al aumentar la captura y almacenamiento de Carbono en el suelo, se generan Créditos de Carbono, que son comercializados en mercados internacionales, peor a la vez se logran suelos biológicamente más activos, lo cual se refleja en un incremento significativo de la producción de forraje; y al mejorar la salud del ecosistema, su fertilidad natural e infiltración de agua aumentan, mejora la oferta forrajera, por ende se reduce la necesidad de insumos, disminuyendo los costos de producción.