Cientos de mensajes de WhatsApp y correos electrónicos fueron enviados a todos los medios en las últimas horas. Los equipos de prensa de la Ciudad de Buenos Aires se focalizaron en la difusión de una gacetilla que anunciaba con regocijo un reconocimiento internacional al Ejecutivo porteño por sus políticas y cuidados sobre los espacios verdes.

“La Ciudad recibió un reconocimiento internacional por su compromiso con los parques y plazas”, destaca el título del documento. Según la información oficial, esa distinción fue otorgada por World Urban Parks, “una organización global que reúne a expertos de más de 40 países, destacó la labor del Gobierno porteño en la planificación urbana sostenible, la gestión de parques y plazas”.
Quienes se especializan en el cuidado de espacios verdes no tardaron en apuntar contra éste supuesto reconocimiento, y criticaron la falta de “políticas verdes” para el cuidado de las plazas y parques de todo el distrito.
“Es impresionante la capacidad que tienen estos tipos para conseguir premios truchos. World Urban Parks es una organización privada que nuclea un montón de organismos que intentan intercambiar más posturas políticas que técnicas sobre la cuestión del desarrollo de parques urbanos, pero lo llamativo es que por lo que premiaron al gobierno de la ciudad son por espacios verdes que la mayor parte de los casos no estaban en la agenda del gobierno, sino que tenían otros planes en esos lugares”, sucumbió en diálogo con Tiempo Fabio Márquez, Licenciado en Diseño del Paisaje y Director de proyectos de la Asociación Cultura Abasto.

El «compromiso» forzado de la Ciudad
El especialista recordó que muchos de los espacios verdes que hoy están en la Ciudad, fueron por los reclamos históricos de quienes habitan los barrios y por la lucha que llevaron adelante diferentes agrupaciones.
“La primera plaza de Villa Santa Rita no hubiera existido si no fuera por la pelea de años de vecinas y vecinos para que salga una norma de la legislatura y después perseguirlos para que la cumplan. El Parque Cultural Estación Colegiales, es la mitad de lo grande que podría ser porque Larreta vendió los terrenos y habría privatizado muchos más si los vecinos no hubieran pugnado para que ese parque exista”, agregó Márquez, al mismo tiempo destaca que en los últimos 10 años prácticamente la mayor parte de los espacios verdes de la ciudad surgieron cambiándole la agenda al gobierno de la ciudad.
“Otros ejemplos son Plaza Colegiales, Manzana 66, o el Parque de la Estación, y este premio parece que fue un texto redactado por el propio gobierno de la ciudad, ¿no? Un lavado de cara simulando una política ambiental que no tienen y que claramente carecen de compromiso para lograrlo”.
En el mismo sentido, María Angélica Di Giacomo, la titular de la agrupación Basta de Mutilar Nuestros Árboles, contó a Tiempo que fue invitada a un evento por el sesquicentenario (150.º aniversario) del parque 3 de febrero. La AALP (Asociación Amigos del Lago de Palermo) empezó en 1990 con la defensa de los espacios verdes.
“En ese encuentro había representantes de varias organizaciones. Cuando me tocó hablar, leí esta gacetilla y dije que habrá personas que se sentirán orgullosas de ese nombramiento de la ciudad pero que yo me sentía orgullosa de todas esas personas que estaban allí en ese evento. De 7 m2 de espacio verde público por habitante pasamos a 4 en estos años. Perdimos gran parte de la costa del Río de la Plata, parte de las playas ferroviarias y la lista sigue”, señaló Di Giacomo.
La especialista puntualizó sobre los ejemplos vertidos en la gacetilla oficial del GCBA y concide con Márques en este punto: “Si vamos a las cuestiones que nombra la nota, son fruto de años y años de lucha vecinal (nada nos es dado, todo es conseguido, como en el feminismo) En el caso particular de Villa Santa Rita, más de 40 años les llevó conseguir una plaza de 1600 m2 cuadrados. El logro es de quienes trabajan todos los días por los bienes comunes
Deforestación urbana PRO
Di Giacomo recordó el ataque sistemático que sufre la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires, una verdadera deforestación urbana que el macrismo viene ejecutando desde hace años.
“Si agregamos la venta de terrenos actual de la comuna 8, el suelo absorbente, el follaje frondoso y el verde vegetal vivo que nos quitaron en la Autopista Dellepiane. Todo, palestra incluida, lo que vamos a perder en el CENARD, que también será vendido, los árboles que perdemos por el Nuevo Puente Labruna, el Gigena, por comentar sólo los últimos dos años, la pérdida es mayor que la ganancia que festejan con bombos y platillos”, enumeró la titular de Basta de Mutilar y remata: “Vergüenza debería darles su política pública de desprecio del verde vegetal vivo, el suelo absorbente y el follaje frondoso”.
Fuente Tiempo Argentino







