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El 13 de marzo de 2013, el entonces arzobispo de Buenos Aires y Primado de Argentina, se impona el nombre de Francisco al haber sido elegido como el Papa 266 de la Iglesia Catlica Apostlica Romana, dando inicio a su pontificado el 19 de marzo de aquel ao.
En enero de este ao recib su ltimo libro, Soemos juntos: El camino a un futuro mejor. En el prlogo, Francisco reflexiona que: “No son solo personas concretas las que estn a prueba, sino pueblos enteros. Pensemos en los Gobiernos que tienen que tomar decisiones en medio de esta pandemia. Qu es lo ms importante? Cuidar a la gente o que el sistema financiero no se detenga? Dejamos en suspenso la maquinaria que genera riqueza, siendo conscientes de que la gente sufrir, aunque as salvemos vidas? En algunos casos los gobiernos no lograron comprender la magnitud de esta enfermedad o no contaron con los recursos necesarios. Estos Gobiernos hipotecaron a su pueblo. Las decisiones que tomaron pusieron a prueba sus prioridades y quedaron expuestos sus valores”.
Asimismo, y con la particularidad de estar anticipndose a un mundo postpandemia, leo su pensamiento con relacin al mundo del trabajo: “Reconocer como sociedad el valor del trabajo no remunerado es vital para nuestro repensar el mundo pos Covid. Por eso creo que es hora de explorar conceptos como el Ingreso Bsico Universal (IBU), tambin conocido como el ‘impuesto negativo a la renta’: un pago fijo incondicional a todos los ciudadanos, que podra distribuirse a travs del sistema impositivo.
El IBU puede redefinir las relaciones en el mercado laboral, garantizndoles a las personas la dignidad de rechazar condiciones de empleo que las encadenan a la pobreza”.
La importancia de la visin de Francisco es que, en la medida en que quienes tienen la responsabilidad de gobernar las naciones lo consideren prudente, puede implementarse en polticas pblicas en pos del bien comn de las sociedades.
En este orden, citando al Papa, en su mensaje del 1 de marzo, el presidente Alberto Fernndez expres ante la Asamblea Legislativa: “Necesitamos aunar voluntades para comprender que ningn pas se salvar solo de la pandemia”.
A nivel internacional, en su discurso al Cuerpo Diplomtico acreditado ante la Santa Sede, el 8 de febrero pasado, Francisco interpelaba a los embajadores: “…no se puede omitir que en el curso de los ltimos aos el sistema multilateral tambin ha manifestado algunos lmites. La pandemia es una ocasin que no se puede desaprovechar para pensar y llevar adelante reformas orgnicas, para que las organizaciones internacionales recuperen su vocacin esencial de servir a la familia humana, para preservar la vida de toda persona y la paz”.
Finalmente, como tantos creyentes de diversas confesiones en el mundo, quiero destacar su viaje apostlico y encuentro en Irak, acompaando a las comunidades perseguidas y coincidiendo con los lderes religiosos Islmicos en la necesidad de lograr la convivencia, dentro de la diversidad y en paz, para el pleno desarrollo de los pueblos.
*Por el embajador Guillermo Oliveri, secretario de Culto de la Nacin.
