Las paritarias docentes en las provincias se desarrollan en escenarios ásperos debido al desacuerdo de algunos gremios con las propuestas de mejoras salariales que ofrecieron los gobiernos. La semana arrancó con paro en Jujuy y cerró con medidas de fuerza en Entre Ríos y Neuquén, mientras se anunciaron más reclamos en Santa Fe, Córdoba y en Chaco.
En Jujuy, los docentes de nivel medio y superior que está nucleados en el gremio CEDEMS (Centro de Docentes de Enseñanza Media y Superior) realizaron un paro con movilización, en rechazo al acuerdo paritario que firmó el sindicato de maestros ADEP (Asociación de Educadores Provinciales). En los últimos días de junio el gobierno provincial cerró con esta última organización un aumento del 10% con el sueldo de julio, el pago del FONID con fondos provinciales, un bono de $ 55.000 y una suma para cubrir gastos de transporte. De acuerdo al CEDEMS, para un docente que se incorpora al sistema esto implica un salario que promedia los $340.000, por lo que exigen mejoras salariales. Este sábado se realizará una asamblea extraordinaria, en donde es posible que se adopten nuevas medidas de fuerza la próxima semana, según Mercedes Sosa, la secretaria general.
En Entre Ríos, este jueves y viernes pararon la AGMER (Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos), el SADOP (Sindicato Argentino de Docentes Privados) y AMET (Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica) en reclamo a un aumento salarial. En las últimas horas se supo que el gobierno ofreció igualar los salarios a la variación producida por inflación hasta fin de año, una compensación de $ 200.000 -a abonarse en cinco partes mensuales, de agosto a diciembre- y la incorporación al básico de una de las cuotas, a cuenta de futuros aumentos a partir de enero de 2025. La respuesta gremial fue convocar a una asamblea general para el próximo martes 6 y dejar en suspenso un paro de dos días que estaba previsto para miércoles 7 y jueves 8. Hasta el martes habrá asambleas zonales y por áreas en donde se debatirá sobre la propuesta oficial.
En Neuquén la situación también es compleja. La fuerte Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén (ATEN) realizó una medida de fuerza de dos días esta semana y convocó a tres días de paro para la semana próxima, desde el martes 6, si no se constituye una mesa de diálogo con el gobierno provincial. Uno de los ejes de la protesta es el rechazo a la ley que aprobó la Legislatura que establece un “plus” salarial para los docentes cuyas inasistencias no superen las tres trimestrales, con un límite de dos mensuales, debidamente justificadas y encuadradas en el régimen de licencias. “No es un premio, sino un castigo para quienes tienen la complejidad de enfermarse”, fue la respuesta del gremio en un comunicado. Por otro lado, piden un incremento salarial, que se efectivicen los puntos para los secretarios y asesores pedagógicos; la suba de las partidas para refrigerio y comedor, entre otros reclamos. Hasta el momento, el gobierno provincial se mostró renuente a constituir una mesa para negociar un aumento salarial.
En Córdoba el gobernador Martín Llaryora instruyó que se paguen los sueldos de los docentes provinciales con aumento, retroactivo a junio, pese al rechazo de la poderosa Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC) y de SADOP. Los incrementos son de un 2,5% remunerativo, más una suma fija de $ 25.000 para junio y un 2%, más otro no remunerativo del mismo monto para julio. Además, los haberes se equipararán con una inflación en mayo del 4,08% y del 3,7% en junio, según la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Provincia. Para UEPC y SADOP la propuesta es insuficiente y ratificaron un paro de 48 horas para la próxima semana.
Como respuesta al anuncio del gobernador Leandro Zdero, de Chaco, que informó a través de sus redes sociales que se pagará la cláusula gatillo con el sueldo de julio a la docencia, es decir, un aumento 18%, el Sindicato de Educadores del Chaco (SECH) paró dos días esta semana y anunció nuevas medidas de fuerza para miércoles 7 y jueves 8 de agosto. La conducción gremial pidió al gobierno provincial que se constituya una mesa de diálogo pero hasta el momento no hubo respuesta. “Es necesario que haya ajustes salariales adecuados ante el incremento del costo de vida. El aumento en los precios de los servicios, combustibles y la canasta básica han erosionado nuestro poder adquisitivo. Por ello, exigimos con urgencia una propuesta salarial concreta que responda a las necesidades reales de los trabajadores de la educación”, sostiene el pronunciamiento que difundió el SECH.
Este último jueves, en Santa Fe, los ministros de Educación, José Goity, y de Economía, Pablo Olivares, en una nueva reunión con la conducción de los gremios docentes, ofrecieron un acuerdo trimestral del 9,95 %, a concretarse con un 4,5 % en julio -tomando como base los haberes de junio y a efectivizarse por planilla complementaria en agosto-, 3 % en agosto y 2,45 en septiembre. En principio, las asambleas zonales de la Asociación del Magisterio de Santa Fe (AMSAFE), comenzaron a rechazar la propuesta, camino a una asamblea general que decidirá en las próximas horas si la semana próxima habrá un paro de dos días.
Fuente Ambito