LOS PERITOS DE LA GENDARMERÍA INFORMARON QUÉ ENCONTRARON EN EL CADÁVER DEL FISCAL MUERTO DE UN DISPARO EN LA CABEZA EL 15 DE ENERO DE 2015.
DyN/La pericia toxicológica que está realizando la Gendarmería podría cambiar la investigación acerca de la muerte del fiscal Alberto Nisman. De acuerdo al estudio, publicado por el medio oficialista TN, el fiscal tenía en su sangre ketamina y clonazepam.
El clonazepam es un medicamento de uso muy frecuente que es comúnmente utilizado como ansiolítico para inducir el sueño, mientras que la ketamina es un anestésico para animales, aunque también suele usarse con fines recreativos por sus efectos pseudoalucinógenos.
“Los especialistas en toxicología, aseguran que la ketamina usada como droga recreativa genera estados pseudo-alucinógenos. Pero si hubiera sido usada para dormir a Nisman tendría un efecto muy fuerte y “debería haber un sitio de inyección” en el cuerpo del ex fiscal, ya que ese tipo de anestesia se suministra en forma intravenosa”, explica la nota de Clarín.
Ahora la pericia deberá determinar si el fiscal tomó las sustancias por su propia cuenta o, por el contrario, fue inyectado, algo complejo si se recuerda que no había indicios de pinchazos en su cuerpo.
El informe de las pericias realizadas por Gendarmería, que contaron con la presencia de peritos del experto informático Diego Lagomarsino y de la familia de Nisman, sería presentado ante el titular del Juzgado Criminal y Correccional Federal número 10 dentro de las próximas dos semanas.