Trabajadores y trabajadoras despedidos de Yacimientos Carboníferos de Río Turbio (YCRT) dieron a conocer un documento en el que ponen de manifiesto el momento que les toca vivir tras la determinación
de la intervención encabezada por Aníbal Fernández, a quien acusan de haber llegado a Santa Cruz para concretar despidos masivos. “Aníbal Fernández vino por nuestras cabezas”, dijeron los trabajadores despedidos (417 en total) a los que el interventor echó bajo el pretexto que habían sido nombrados por la anterior gestión. Los despedidos le escribieron una carta abierta al presidente.
“El 29 de enero, el Presidente de la Nación Alberto Fernández designó a través del decreto 119/20 como nuevo interventor de YCRT al Aníbal Fernández. Cuando nos enteramos de esa noticia todos lo tomamos de una manera positiva; ya que sabíamos por declaraciones en los medios que querían reactivar y poner en funcionamiento la mega usina en Rio Turbio y a su vez exportar carbón con un muelle Arturo Illia en Punta Loyola, ya preparado para trabajar desde el dia uno… Toda esa alegría duro poco, porque después nos echaron a todos para poner a su gente”, dicen los trabajadores que además le escribieron una carta abierta a Alberto Fernández.
En ese texto dicen que “el día 19 de febrero (22 días de haber sido nombrado) nos desayunamos con la noticia que nos habían despedido. Habían Dejado 417 personas y familias en la calle. Ese 19 de febrero recibimos la visita del gerente de Producción, Federico Vera, y el Coordinador General, José Luca Gancerain, en Punta Loyola, para hacer una recorrida de las instalaciones (acá ya notamos algo raro porque la recorrida la hicieron junto a la Intersindical de ATE Punta Loyola). Luego de finalizar la visita, a los 10 Minutos (literal) ya se conoció el despido de todos nosotros. Fueron a darnos el ‘beso de Judas’ sin dudarlo.”
“Lo que la intervención argumentó y argumenta es que estábamos mal ingresados; nos informó que aceptaba una revisión de legajos, lo cual nos parece perfecto para quitar sospechas y demás. El 22 de febrero viajamos hacia Rio Turbio para la revisión de legajos, lo hicimos frente al subgerente de Recursos Humanos, y la revisión dio todo bien”, explican los trabajadores en su carta. “Le propusimos que todo aquél de las 417 personas que no tengan los papeles en regla tenía el visto bueno de todos para tomar la decisión de pedir su despido; pero no: Aníbal Fernández había venido por la cabeza de todos… Había venido a dejar sin sustento a 417 familias.”
“¿Que les dirá Aníbal Fernández a los hijos, padres, abuelos de estas 417 personas despedidas?”, se preguntan. “Nada, como aquella tarde donde se paró en medio de las escaleras en Rio Turbio y dijo de forma pedante “acá no hay vuelta atrás, empiezan a llegar los telegramas de despido“.No somos ñoquis, todos fuimos a trabajar día a día, todo el personal activo esta de testigo y muchos pusieron la cara por nosotros; todos nuestros jefes a través de un memo justificaron nuestro trabajo en la empresa, que nos necesitaban para producir todo lo que la nueva intervención aspiraba; pero tampoco sirvió porque del día uno Aníbal Fernández había venido por nuestras cabezas”, reiteran los mineros.
Hoy y en medio de la cuarentena obligatoria por el coronavirus, muchos de esos 417 despedidos no tienen que comer. Por eso solicitamos la ayuda de todos para que este mensaje llegue a todo el país. El presidente de la Nación, Alberto Fernández, dijo que “voy a ser duro con los que despidan”. Señor presidente, comience por casa, sea duro con su Interventor Aníbal Fernández que despidió y dejo en la calle a 417 trabajadores. Creemos en usted”, finaliza la carta abierta.
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Clarín
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