El video dura menos de treinta segundos. Y muestra el tramo final de una escena dramática que se vivió esta mañana en la estación de trenes de Retiro, cuando cuatro personas terminaron baleadas, entre ellas dos policías.
El tirador está en el piso. Lo rodean varios agentes, pero no suelta el arma que segundos le había robado a un oficial de la comisaría vecinal 1A de la Policía de la Ciudad. Son las 7.30 de la mañana. Por suerte, no es el hormiguero de gente de la prepandemia.
Jonathan Mosqueda, de 31 años, es el protagonista central. Balancea una Bersa calibre 9 milímetros con la que le apunta a un efectivo de la motorizada. No la suelta, pero apenas hace un leve amague uno de los policías trata de sacarle la pistola de una patada. En las imágenes se ve claramente cuando dispara. Enseguida se suman más policías. En el forcejeo el policía termina herido de bala. Y el agresor también.
Según fuentes policiales, hubo al menos 24 disparos. Una agente de la Policía Federal (PFA) terminó lesionada en la mano derecha producto del rebote de una bala. Por el roce de uno de los proyectiles, también terminó herido un ciclista de 24 años que pasaba por allí.
De acuerdo a las fuentes, los dos policías heridos fueron derivados por el SAME al Hospital Churruca. El agresor, con una herida de arma de fuego en el abdomen, está internado en el Hospital Fernández.
Los registros del Sistema Federal de Comunicaciones Policiales (Sifcop) indican que hace cuatro años estuvo internado por orden del Juzgado de Familia 3 de San Martín.
Juan, un barrendero que fue testigo de parte de la secuencia, contó esta mañana cómo comenzó todo. “Le sacó el fierro de atrás y después vino corriendo hasta la esquina. Lo rodearon los policías y le pegaron unos tiros en las piernas”, señaló en declaraciones a Crónica TV.
Otro tiroteo, esta vez en Belgrano: policías retirados mataron a un motochorro
“Quería disparar a cualquier persona”, entendió, aunque no pudo hacerlo porque le costó sacarle el seguro a la pistola. Juan reconoció que conoce a Mosqueda. Lo calificó como “conflictivo” y “agresivo”. “Siempre hace problema, ayer -por el lunes- había un muchacho fumando y le sacó el cigarrillo de la boca. A veces anda desnudo, se pone con una frazada y pide plata. A mí me pide bolsas”, reconoció.
LN / DS
